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Hace dos años, se produjo uno de los peores atropellos a la democracia de toda nuestra historia. Una horda de vándalos atracó la sede del Congreso y le prendió fuego, como corolario de la demencial campaña de violencia sembrada por los grandes grupos mediáticos que encabezan ABC y Telefuturo, así como por políticos de la oposición y la disidencia colorada de aquel entonces. Sorprendentemente, ahora se presentan como los que defendieron la Constitución, pero la realidad demostró sobradamente que actuaron como sus sepultureros. Para el senador colorado, Enrique Riera, “mientras no tengamos una democracia con instituciones fuertes, la gente seguirá teniéndole más miedo a un periodista que a un juez”.
ASUNCIÓN.- Los responsables morales e intelectuales del incidente ocurrido aquel 31 de marzo de 2017, Efraín Alegre, presidente del PLRA; Rafael Filizzola, titular del PDP, y los empresarios de medios, los dueños de ABC Color y radio ABC Cardinal, así como Antonio J. Vierci, propietario de Telefuturo y diario Última Hora, quienes incitaron a la violencia, lo que llevó a la muerte de un joven y el incendio de la sede del Congreso, siguen impunes. Ellos ni siquiera fueron incluidos en los procesos y siguen campantes, azuzando desde sus respectivos lugares la comisión de más violencia, rotulando como “defensa de la Constitución Nacional”.
El Dr. Enrique Riera, consultado sobre el 31M, dijo: “Todos queremos saber la verdad y que se haga justicia, pero para lograrlo hay que dejar actuar a los órganos institucionales, judiciales y fiscales sin ningún tipo de influencias políticas ni mediáticas. Caso contrario se produce una justicia selectiva y una investigación dirigida”.
Referente al papel que juegan los medios de comunicación, sostuvo que hay algunos que son muy favorables al oficialismo, “pero gracias a Dios otros mantienen su postura crítica. Esto permite a la ciudadanía escuchar las dos campanas y sacar sus propias conclusiones, pero realmente en algunos casos es muy llamativo, porque tienen obsesión con algunas personas de posición pública, vinculadas al gobierno anterior, con quienes son muy críticos y suaves con las actuales”, refirió.
Puntualizó que el 31M no se justificó la violencia, pero realmente fue un momento difícil donde el apoyo mediático y político apareció solo de un lado, y eso distorsionó la idea. Remarcó que probablemente con los años las cosas se vayan poniendo en su lugar y se podrá mirar más objetivamente.
UTILIZAR TRAGEDIA PARA BENEFICIO PROPIO
Criticó que es lamentable que se utilice una tragedia, buscando beneficios políticos partidarios. “Eso no debería ser así, pero es un tema muy difícil de que nuestra dirigencia mayor de los partidos de oposición lo entiendan; están jugando con la memoria de un joven y de su familia”, lamentó Riera.
Referente a que este no sería una coalición de los medios y los opositores contra la democracia, apuntó: “No creo que sea tanto así, pero el propio padre de Rodrigo Quintana, ya se dio cuenta que lo utilizaron. Cuando asumió el presidente, Mario Abdo Benítez, le saludó y le abrazó, incluso en su discurso lo mencionó y ahora está completamente desilusionado, esa fue señal que fue utilizado políticamente, eso sin entrar a juzgar dónde están los culpables y también los inocentes”, enfatizó Riera.
Manifestó que todo lo mencionado afecta a la justicia. “Creo que es un caso gravísimo que se haya quemado el Congreso, cualquiera sea la decisión, guste o no a la gente, no se puede llegar al extremo de quemar el Congreso y que no haya responsables. No hay justificativo alguno, con ese criterio vamos a quemar el Palacio de Justicia, si no nos gustan las sentencias y el Palacio de Gobierno, si no nos gusta el decreto que firma el presidente de la República”, concluyó Riera.
