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Como parte de su campaña de atacar permanentemente al presidente Horacio Cartes, el matutino ABC lleva tiempo publicando las malas condiciones de la infraestructura de escuelas y colegios nacionales de todo el país. Lo que no hace es reconocer que es un problema heredado de años atrás y que cuando el gobierno actual quiso solucionarlo, el Senado se lo impidió.
ASUNCIÓN.- No hay daño más grave que se puede hacer a la opinión pública que dar una información cierta, pero teñida de falsedades e imprecisiones, algo en lo que es experto el matutino de Aldo Zuccolillo.
La campaña actual es la de publicar la situación de escuelas y colegios de todo el país, que nadie niega que es pésima y, en algunos casos, hasta peligrosa para niños y jóvenes que allí reciben clases.
De hecho, el gobierno está tan consciente de esta realidad, y tan preocupado por ella, que el año pasado intentó que se aprobara la Ley de Emergencia Educativa, que le permitiría disponer de fondos extraordinarios para atacar con énfasis y resultados positivos la reparación de la infraestructura edilicia del sector educativo.
Pero no pudo ser. El proyecto tuvo media sanción en la Cámara de Diputados, pero al llegar al Senado lo modificaron de tal manera que perdió su carácter de emergencia, puesto que quitó la potestad al gobierno de que pudiera contratar a empresas del área por la vía de la excepción.
Esto no lo menciona el diario ABC, posiblemente porque en el Senado están los amigos y socios del patrón, quienes fueron los que tuvieron mayoría para convertir un proyecto positivo para el país en un mamotreto sin ningún objetivo.
El ministro de Educación y Ciencia, Enrique Riera, reconoció que hay aproximadamente 500 escuelas y colegios, en todo el país, que están en pésimas condiciones edilicias. Muchas de ellas ya hubieran sido arregladas si el Ejecutivo tenía la potestad de hacerlo pero como no hay vía de excepción, el proceso al que debe recurrir es el lento, pesado y burocrático del llamado a licitación para cada local y cada problema.
Por si fuera poco, esta terrible situación lleva varias décadas y es la primera vez que un gobierno –del color que fuere- la toma en serio y busca soluciones de fondo. Pero esto no lo ve el diario de Acero, cada vez más firme en su intención de desacreditar a HC.
