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En nombre del supuesto combate a la corrupción, que no figura en sus planes, el diario ABC está llevando a cabo una auténtica “caza de brujas”. Organiza grupos de patoteros que realizan “escraches” a sus enemigos políticos y hasta atropellan la sede del Poder Judicial. Su último “logro” es la renuncia del senador Jorge Oviedo Matto; una muestra grosera de cómo sustituyen a las instituciones de la República, violentando el Estado de Derecho.
ASUNCIÓN.- Es reconfortante ver las manifestaciones en las que la ciudadanía de manera espontánea se aglutina para hacer uso de su derecho a reclamar a las autoridades y exigir el castigo de los delincuentes. Sin embargo, cuando esta lucha es orquestada y manipulada por personajes que no tienen en sus planes un honesto combate a la corrupción, sino que están en la búsqueda permanente de sus propios beneficios, esto le resta un gran valor a lo logrado.
Es lo que ocurre en este momento con esta movilización que se pretende vestir con los colores de la ciudadanía libre y espontánea, y sin embargo, atrás se notan los hilos que mueven los que manejan el diario de los Zuccolillo, que pretenden convertir a todos los paraguayos en los títeres de sus intereses.
A ABC no le interesa luchar contra la corrupción; al contrario, cuantos más ladrones de guantes blancos haya en el gobierno de turno, mayor es el negocio que hace el diario, autodenominado como el paladín de este combate. Además, casi siempre en los negociados están ellos, los representantes de ABC, haciendo pingues negocios a costa de la gente a la que dicen defender.
Pusieron en marcha una verdadera caza de brujas, persiguiendo a senadores y diputados que no pertenecen a los sectores que siguen al pie de la letra sus indicaciones. El primero que cayó fue José María Ibáñez, quien renunció a la Cámara de Diputados. Y en menos de 3 días le siguieron Óscar González Daher y Jorge Oviedo Matto, en el Senado.
En todo esto está detrás la mano del diario, que organiza grupos de patoteros para que escrachen a sus enemigos políticos, llegando, incluso, a atropellar el Poder Judicial. Oviedo Matto es su último logro, hecho que confirma que este medio de prensa pretende groseramente sustituir a las instituciones de la República. En realidad, lo que están haciendo los responsables de ABC es violentar el Estado de Derecho.
