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Al menos 22 civiles, entre ellos ocho niños, murieron desde el miércoles en bombardeos sirios contra sectores bajo control insurgente en el norte de Siria, informó el jueves el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
“Doce personas murieron este miércoles, entre ellas tres niños, en bombardeos de artillería contra la localidad de Kafranbel, en la provincia de Idlib”, dijo a la AFP Rami Abdel Arhman, director del OSDH. Otro niño murió en la ciudad de Maaret al-Noomane, agregó.
Este balance se agrega al de “nueve civiles, entre ellos cuatro niños, muertos el miércoles en ataques contra varias localidades”, particularmente en el norte de la provincia de Hama y en el esto de la provincia de Alepo, indicó el OSDH.
La provincia de Idleb y algunas zonas de las provincias limítrofes de Hama (al sur de Idleb), Alepo (este) y Lataquia (este) están bajo control yihadista o rebelde.
Recientemente, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) se alarmó este martes por la muertes de civiles en esa región.
“En marzo, murieron 90 civiles, casi la mitad niños. Más de 86.500 personas fueron desplazadas en febrero y marzo”, dijo un comunicado de OCHA.
