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Esta temporada que se va despidiendo nos deja la sensación de haber vivido un buen año, independientemente del club que cada uno profesa. Pero si hacemos un análisis global, somero e incompleto, nos encontramos que, juntamente con las numerosas y explosivas promociones juveniles, recuperamos el talento maduro de varios que parecían ya terminados para la carrera futbolística.
ASUNCIÓN.- Esa fue la primera impresión que tuvimos, ya desde hace un tiempo cuando Olimpia repatrió a un averiado Roque Santa Cruz y Cerro hizo lo propio con Nelson Haedo Valdez. Entre nosotros, seguía Santiago Salcedo tan campante marcando goles hasta alcanzar un récord que no corre peligro, aparentemente, al menos en los próximos años. Más que nada porque los goleadores emergentes, se van muy rápido a meter goles lejos del país.
Y para completar un lote de históricos de la selección, llegó Óscar “Tacuara” Cardozo, que enrolado en Libertad, mano a mano con “Sasá” elevaron al Guma y se cansaron de hacer goles, y Cerro concretó el regreso de Víctor “Topo” Cáceres que mostró en unos cuantos partidos que todavía está para dar guerra.
Pero, ¿se puede olvidar a Fabio Escobar y a Dionisio “Loco” Pérez, simplemente por los últimos tramos de sus carreras en equipos de menor reputación? Sin embargo ya están en la línea de los 100 goles, como Fredy Bareiro, que tras pasar por todos los grandes, terminó en el atribulado Luqueño que por poco no cae al fondo del pozo del descenso.
ESTRELLAS JUVENILES
La lista que presentamos tal vez no sea completa porque incluye solo a los que se incorporaron este año, y no a varios que ya desde la temporada pasada asomaron y permanecieron en sus respectivos equipos, como Richard Sánchez, Kevin Fernández o Rodrigo Bogarín. Es que la lista de “Sub 19”, incluidos por obligación reglamentaria, permitió descubrir brillantes figuras con luminoso futuro.
Veamos: Iván Franco se convirtió en imprescindible en la primera de Libertad después que fue promocionado por Aldo Bobadilla. Hugo Martínez, con menos partidos, también se destacó en el “Guma” y asoma hacia su futura consagración.
Y hubo otros que marcaron a fuego su presencia en primera: Rodney Redes, de Guaraní, promocionado por el español Fernando Burgo, destacadísimo en las últimas fechas del torneo lo mismo que Hugo Quintana de Olimpia y Sergio Fretes de Nacional. Todos con planes de seguir en el plantel profesional.
Los cerristas, Marcelino Ñamandú y Fernando Ovelar, éste último con apenas 14 años, le dieron la cara alegre y juvenil a un equipo aburrido. Blas Armoa fue el salvador de Sportivo Luqueño en varios candentes partidos e Iván Cazal fue factor gravitante para la gran arremetida del Deportivo Santaní para salvarse del descenso.
