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Monseñor Edmundo Valenzuela, arzobispo de Asunción, basó su homilía al momento que vive nuestro país, el inicio del nuevo periodo presidencial, en la celebración del Te Deum por los 481 años de Fundación de Asunción y los festejos patronales. Al tiempo de implorar la bendición de la Virgen Protectora, pidió a las nuevas autoridades que utilicen prudentemente su poder.
ASUNCIÓN.- Agradeciendo a Dios por el periodo presidencial que ha terminado y destacando que la gestión del presidente Horacio Cartes se ha caracterizado por el crecimiento en infraestructura, la estabilidad económica y mejoras de vivienda, comenzó su homilía Monseñor Edmundo Valenzuela en la celebración central en honor a la Virgen Nuestra Señora de la Asunción, patrona de nuestra capital y por la recordación del nuevo aniversario de esta ciudad.
Remarcó también Valenzuela que aún hay mucho por hacer y pidió la bendición de la Virgen a las nuevas autoridades, “para que cumplan apropiadamente su servicio a la nación y que utilicen prudentemente su poder temporal, en beneficio de todos los hijos de nuestra Santa Protectora”, manifestó.
Asimismo, enfatizó que su deseo es que nuestro país se extienda su reino (de la Virgen) de verdad, justicia y la paz, durante todo este nuevo periodo presidencial. En el oficio religioso estuvo el presidente Mario Abdo Benítez, junto con su esposa Silvana López Moreira y varias otras autoridades de su gabinete.
En otro momento, el prelado señaló que el nuevo gobierno tiene un gran desafío, mantener los lazos que conforman la nación, los que se lograrán mediante el fortalecimiento de las familias y una firme voluntad para vencer el estado de corrupción e impunidad que permea las instituciones.
Velar por el derecho a la vida, fortalecer la familia, basado en la unión del hombre y la mujer. “Actuemos con sentido de unidad, respetando nuestras diferencias, sin consentir la violencia y ni la desvalorización de nuestra identidad nacional y así poder integrarnos a la comunidad internacional con voz propia, libre y soberana”, expresó.
Igualmente, pidió a todos los paraguayos, que “seamos solidarios entre nosotros y hospitalarios con los de afuera, pero no complacientes con quienes condicionan su amistad con nuestra nación a una colonización ideológica, que intenten coaccionarnos para aceptar antivalores, como la legalización del aborto o la ideología de género a cambio de ayuda financiera”, enfatizó Monseñor Valenzuela.
En todo momento, el Arzobispo pidió la participación de la Virgen María en la vida de todos los paraguayos y que nos ilumine siempre y en especial a los nuevos miembros del gobierno “para respetar la Constitución Nacional y contar con una Justicia rápida y barata para todos”, sentenció.
“EL CÁNCER DE LA CORRUPCIÓN DEBE SER EXTIRPADO”, DIJO VALENZUELA
La homilía del arzobispo de Asunción fue bastante prolongada y abordó varios puntos del quehacer nacional. El Te Deum tuvo lugar en la Catedral Metropolitana, tras la asunción del nuevo presidente.
“El cáncer de la corrupción debe ser extirpado y se debe buscar el fin de la impunidad. Eliminemos el tráfico de las drogas y que ninguna autoridad nacional se encuentre involucrado en ello”, manifestó monseñor Edmundo Valenzuela.
Explicó también que para vencer a estos males que aquejan a nuestro país (la corrupción y la impunidad) “debemos impulsar con voluntad firme la reforma del sistema judicial y penitenciario, la depuración y el saneamiento estructural de las instituciones públicas y contar con jueces y fiscales probos en todas las instancias judiciales”, destacó.
Agregó que “una Justicia proba e independiente será la mejor garantía para consolidad la democracia”.
Por otra parte, vale la pena remarcar que monseñor Edmundo Valenzuela en muchas intervenciones en los últimos tiempos, destacó la gestión del expresidente Horacio Cartes. Hace unos días, en la inauguración del Templo en el Barrio San Francisco, dijo que “el presidente de la República, don Horacio Cartes, se sintió con un mayor compromiso para con nuestros hermanos necesitados de la Chacarita y comenzó el proyecto del Complejo habitacional del Barrio San Francisco, que ahora es ya una hermosa realidad, una sinfonía de amor y de caridad, en honor al Papa y en auxilio a los queridos chacariteños y vecinos de Zeballos”, expresó.
Y finalizó señalando: “Que el Señor les recompense a todos y que la Virgen de la Asunción, patrona de nuestra Arquidiócesis y del Paraguay cuya fiesta ya estamos celebrando, les bendiga y acompañe”, subrayó.
