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El arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, sigue sorprendiendo negativamente. El domingo último visitó al cura Silvestre Olmedo, preso en Emboscada por coacción y acoso sexual, para darle su “apoyo” y “bendición”. En un comunicado del Arzobispado, que parecía una composición poética, destacaron que ambos se “fundieron en un abrazo”. Semanas atrás, Valenzuela ya había defendido al sacerdote al comparar sus acciones con una “piedrita”, afirmando que no se debe convertir en una “montaña”.
ASUNCIÓN.- A través un poético comunicado, el Arzobispado se refirió al encuentro del domingo último entre Mons. Edmundo Valenzuela y el sacerdote acosador, en el penal de Emboscada.
El texto inicia diciendo “El reloj marcaba las 15 horas del domingo cuando se abrió el portón de la penitenciaría regional de Emboscada, situada en una zona despoblada de la localidad, a 32 kilómetros de Asunción”.
“El hombre que está enfrentando una dura prueba, se fundió en un abrazo con su obispo que se acercó a él, para darle su apoyo y bendición de la Iglesia en el momento en que más precisa de la oración de todos los fieles”, refiere parte del texto publicado en la web del arzobispado.
Continúa la poética narración que “las palabras fortalecieron el espíritu del sacerdote que manifestó estar frente a un gran reto, que lo enfrentará apoyado en el Señor, como uno más de los 1.400 hombres que allí guardan reclusión, sometido a la Justicia sin poner ningún obstáculo”.
Semanas atrás, el arzobispo fue criticado por un polémico comunicado donde refería que no se debe hacer una montaña de un piedrita, haciendo alusión a un supuesto caso de acoso que involucraba a un sacerdote de Limpio, hoy recluido en Emboscada.
APOYO A ACOSADOR
Por lado, un grupo de feligreses de la Parroquia San José de Luque se manifestaron en favor del sacerdote Olmedo. La abogada Antonia Sánchez, que defiende al cura, dijo que “fue un simple toqueteo”. La misma anunció que va pedir el cambio de la caratula, ya que considera que no corresponde la medida de prisión que se dictó contra del acusado. El religioso guarda reclusión en la cárcel de Emboscada.
Consultada acerca de su postura como mujer y no como profesional, señaló que conoce perfectamente la forma de trabajar del sacerdote Silvestre y que la tranquilidad que presenta el padre es solo el de una persona inocente.
Feligreses se movilizaron durante la misa dominical, donde con pancartas manifestaron su apoyo al religioso. “Padre Silvestre, no estás solo”, reza uno de los escritos.
“Te humillaron, te calumniaron, te difamaron, te calumniaron, te crucificaron espiritualmente, pero saldrás victorioso”, agrega otro cartel. La Iglesia Católica apartó del cargo a Silvestre, tras haber sido denunciado por acosar y manosear a una joven.
