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Más de154 personas murieron, 212 más resultaron heridas y un número indeterminado están desaparecidas después de una avalancha ocasionada por las intensas lluvias en Mocoa, ciudad de unos 45.000 habitantes, del departamento del Putumayo, en el suroeste de Colombia. Las aguas se llevaron por delante varias viviendas, postes de energía, vehículos, árboles y destruyeron al menos dos puentes. El presidente de la República, Juan Manuel Santos, quien se trasladó hasta el lugar, dijo que en la madrugada del sábado cayó 130 milímetros de agua, que sería el 30% de la lluvia de un mes que se suele registrar en la zona, esto produjo el desborde de tres ríos, señaló.
PUTUMAYO, Colombia.-“En una noche-madrugada se recogieron 130 milímetros por centímetro cúbico cuando usualmente, en todo un mes, llueve 400 milímetros. Es decir, el 30% de la lluvia de un mes se produjo anoche”, explicó el mandatario.
“Vamos a declarar estado de calamidad, a organizar un plan de acción con todas las instituciones que están ya aquí presentes, a iniciar el proceso de ayuda humanitaria, comenzar con el proceso fúnebre y a restablecer los servicios suspendidos”.
Por el momento, se contabilizan cientos de desaparecidos en una ciudad de unos 45.000 habitantes, según el balance de la Cruz Roja colombiana, ayer en horas de la tarde.
El presidente Santos no quiso dar una cifra concreta, las autoridades siguen haciendo un inventario. Ayer cientos de ciudadanos siguen reclamando y buscando a sus familiares. Una decena de niños solos están siendo atendidos por el Instituto de Bienestar Familiar a la espera de que aparezcan sus padres.
Asimismo, dijo que ordenó a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y a las Fuerzas Militares atención inmediata en Mocoa. La UNGRD informó que un grupo de la Unidad de Operaciones Especiales en Emergencias y Desastres de la Policía Nacional (Ponalsar) se dirigía al lugar y llevan consigo alimentos, equipos de aseo, colchonetas y depósitos con agua para atender la tragedia.
“Una sala de crisis con autoridades locales y otras 150 personas, entre soldados, policías y miembros de organismos de socorro, trabajan en la búsqueda de desaparecidos y en la remoción del material, apuntó Carlos Iván Márquez, director de la UNGRD.
Por su parte, la gobernadora de Putumayo, Sorrel Aroca, dijo que lo que sucede es una tragedia sin precedentes, “hay cientos de familias que aún no encontramos, barrios desaparecidos”, afirmó.
Las aguas se llevaron por delante varias viviendas, postes de energía, vehículos, árboles y destruyeron al menos dos puentes, agregó el Ejército, cuyos soldados apoyan las labores de rescate y socorro.
