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Los “chalecos amarillos” realizaron este sábado una nueva movilización para protestar contra la política económica del presidente Emmanuel Macron y volvieron a cruzarse con la Policía. Hubo forcejeos, gases lacrimógenos, destrozos y detenidos. El gobierno de Francia, anunció recientemente una disminución en los impuestos para atender parte de los reclamos de los activistas sociales.
PARÍS.- Si bien la Policía había prohibido las marchas en Lyon, Toulouse, Bordeaux y Lille, así como en sitios clave de París como los Campos Elíseos y la Asamblea Nacional, los manifestantes tuvieron fuertes cruces con los efectivos en Toulouse.
Según informaciones, durante los disturbios fueron quemados dos vehículos, una camioneta y un remolque. Además, lanzaron proyectiles contra los efectivos, que respondieron con gases lacrimógenos y un número no precisado de detenidos.
El primer ministro francés, Edouard Philippe, había comunicado recientemente que el gobierno preparaba una disminución de impuestos para responder a las demandas de los activistas sociales, y dijo que esa medida sería anunciada a mediados de abril.
“Hay una inmensa exasperación fiscal (…) Los debates nos indicaron claramente qué camino seguir: debemos bajar los impuestos y bajarlos rápido”, dijo Philippe en la conferencia de prensa de las conclusiones de la encuesta que se extendió por casi tres meses y en la que participaron aproximadamente dos millones de ciudadanos.
Precisamente, la baja de impuestos en los carburantes fue el motivo de las primeras marchas de los chalecos amarillos los que, desde noviembre a la fecha, han abierto sus demandas de manera transversal y vinculante en toda la sociedad, exigiendo hoy cambios en la Constitución y la salida de Emmanuel Macron, presidente de Francia.
Sin embargo, los reclamos se ampliaron luego al incremento de los impuestos en general y a la pérdida del poder adquisitivo como resultado de la política gubernamental.
También reclaman reformar la Carta Magna para que los ciudadanos tengan la posibilidad de impulsar la realización de referendos nacionales sobre temas relevantes de la política francesa.
