ADN Digital
Artículos relacionados
Los diputados tratarán el miércoles el proyecto que declara la pérdida de confianza hacia el presidente de la cámara, Miguel Cuevas, que lleva dos semanas postergado. El liberal Antonio Buzarquis deberá cumplir, ese día, su promesa de presentar la lista de colegas que trafican influencia y piden puestos para sus recomendados. Aunque juró que lo haría, ahora aparenta haberlo olvidado.
ASUNCIÓN.- Nadie cree que, en el supuesto caso de que la llegue a presentar, la lista de Buzarquis contendrá los nombres de todos los que tienen “cupos” en la cámara y la llenan de sus respectivos operadores políticos. Lo más probable es que figuren los que actuaron de frente, siguiendo los trámites permitidos, y no quienes consiguieron trabajo para sus recomendados sin dejar ninguna evidencia de ello, entre quienes, seguramente, figuran Cuevas y el mismo Buzarquis.
De todos modos, es importante recordarle que hizo una promesa cuando acusó a sus colegas de haber cometido el delito de tráfico de influencias, y si no la cumple y da a conocer la mentada lista, se convertirá en cómplice y encubridor de los mismos.
Durante las dos sesiones anteriores, mediante chicanas orquestadas por Cuevas, se evitó el tratamiento del proyecto de declaración presentado por varios diputados de las bancaditas, en donde se manifiesta el retiro de la confianza hacia él, por haber llenado la cámara de planilleros, a los que, encima, les dio un aumentazo de sueldo, y porque pone trabas para la contratación de la empresa que realizará la auditoría externa decidida por el pleno, para que se analice la situación de los funcionarios de Diputados.
Cuando la encuentrista Kattya González presentó el proyecto, dos semanas atrás, Buzarquis inmediatamente se erigió en defensor de Cuevas, asegurando que todos los diputados hacen uso de los “cupos” que les corresponden para llevar como funcionarios a recomendados suyos y que, con ese criterio, todos debían perder la confianza.
Allí, fue que prometió la famosa lista, y unos días después lo volvió a repetir. Sin embargo, en la sesión del último miércoles, pareció ni recordar el tema porque no lo mencionó para nada, posiblemente contento porque al postergarse la declaración contra Cuevas, también se postergaba el plazo que él mismo se concedió.
