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ASUNCIÓN.- Después de mostrarse inflexibles rechazando la idea de que los expresidentes fueran algo más que senadores vitalicios, ahora resulta que Nicanor Duarte Frutos puede optar por otras funciones. Representantes del Movimiento Colorado Añetete y sectores de la oposición no ven ningún impedimento en que el senador electo asuma como director en la Hidroeléctrica Yacyretá.
Haciendo un rápido sondeo, descubrimos que están dispuestos a prestar el acuerdo constitucional para que Duarte Frutos sea director de Yacyretá, las bancadas de Añetete, del PLRA y Hagamos. Casualmente, éstas (con excepción de los llanistas liberales) forman parte del sector que a rajatabla se opone a su juramento y de Horacio Cartes en el Senado, supuestamente porque era inconstitucional que un expresidente fuera otra cosa más que senador vitalicio.
Por supuesto, nadie espera coherencia de nuestra clase política, pero cuando tanto alardean de ser institucionalistas, lo mínimo que se podría esperar es que disimulen sus desaciertos, aunque sea guardando las formas. Si Nicanor solamente podía ser vitalicio, será fantástico escuchar los argumentos que tienen ahora para justificar el acuerdo para que asuma como director de la EBY.
En Colorado Añetete, acorde con la decisión del presidente electo, Mario Abdo Benítez, ya son varios los que se manifiestan totalmente a favor de que Duarte Frutos sea director de la binacional. El último en referirse al tema fue Enrique Bacchetta, quien aseguró que “no hay ningún impedimento” para que lo haga.
Dijo que “si pudo ser embajador y se le prestó el acuerdo por unanimidad en aquel entonces, ¿por qué no podría ser director general de la Entidad Binacional Yacyretá?”.
Aseguró que el expresidente “es un gran líder”, que le había confesado que no quiere renunciar a su banca en el Senado.
Esto parecen pensar hasta los añetete que evitaron que el Congreso aceptara la renuncia de Cartes a la Presidencia de la República, con el argumento de que no apoyarían su juramento como senador, por ser inconstitucional. Parecen no captar que con la interpretación tan sesgada que le dan a la disposición de la Constitución, un expresidente no puede ejercer ningún cargo en la Función Pública, “ni como ordenanza”, como nos dijo el jurista Juan Carlos Mendonca.
