ADN Digital
Artículos relacionados
RÍO DE JANEIRO.- Tiene 1% en las encuestas, pero “100% de chances con Dios”: con la convicción de que la fe mueve montañas, el candidato presidencial por el Partido Patriota, Cabo Daciolo, se convirtió en uno de los fenómenos mediáticos de la campaña presidencial en Brasil. “No soy un político, soy un enviado de Dios”, asevera el bombero de reserva que quiere expulsar a satanás del Parlamento.
El diputado había aceptado hablar cuando partió para “orar y ayunar durante 21 días en las montañas, por el país y por Jair Bolsonaro”, candidato de la extrema derecha apuñalado a inicios de septiembre, con quien tiene fuertes afinidades.
El anuncio del retiro lo anunció a sus 264.000 seguidores en Facebook. Aunque casi no realiza apariciones públicas, Biblia en mano acostumbra a arengar a sus internautas con virulentos videos que comienzan con un “Gloria a Dios”.
“No soy un político, soy un enviado de Dios”, exclamó en la red social Instagram el bombero de reserva, de 42 años, de físico atlético, que quiere expulsar a satanás del Congreso en Brasilia.
“Todo el mundo dice: Daciolo, estás loco de lanzarte a la campaña”, explicó. “Para los hombres, mis posibilidades son de menos de 0,001%. Pero para Dios, son de 100%”, aseguró.
Para él, “los sondeos mienten”, el “fraude electoral” será masivo, pero la victoria está asegurada.
