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ASUNCIÓN.- La caída de ingresos por la exportación de carne bovina, en enero, se debe a varios factores, entre ellos se experimentó una baja de la cotización en el mercado internacional que obligó a la industria local a reducir precios para mantener competitividad.
La exportación cayó 12,5% e impactó fuerte en la contabilidad del sector, pero indican que fue necesario para evitar perder mercado.
Luis Pettengill, miembro de la Cámara Paraguaya de la Carne (Capacar), dijo que “en el 2018, la caída de los ingresos tuvo como principal explicación la reducción del precio del producto a fin de mantener la competitividad en los principales mercados, tendencia que nuevamente se verificó en los resultados del primer mes de este año”.
La depreciación de los signos monetarios de Argentina y Brasil creó un escenario de competencia muy desigual, tirando al piso los precios internacionales de sus producciones. Pettengill dijo al respecto que “en el último año, sus precios quedaron muy por debajo de los nuestros, situación que obligó a adecuar nuestros precios para no perder competitividad”.
La fuerte puja contra tres grandes productores, Brasil, Argentina y Uruguay se hace muy pesada con coyunturas como la que se desarrolla. La competencia con Uruguay es casi pareja, existen una diferencia de al menos US$ 100, con Argentina ya se empina por lo menos US$ 400 dólares y Brasil es inalcanzable, en este caso por dos factores, US$ 700 en la diferencia de precios y la cantidad muy elevada de cabezas de ganado diariamente.
Asume el empresario que existen otros factores, además del mencionado con el peso y el real “también hubo otras particularidades que pesaron en los resultados, como las previsiones y mejoramiento de las plantas y el inicio del periodo de vacunación”.
Los números del Banco Central del Paraguay (BCP), los ingresos por la exportación se elevaron a US$ 84,5 millones a enero, por unas 23.000 toneladas, lo que representa 12% en comparación el mismo mes, enero 2018.
Sigue siendo Rusia el principal importador, cerró enero con una compra de 10.100 toneladas por un valor de US$ 28,4 millones.
