ASUNCIÓN.- El 18 de noviembre del 2004, el entonces presidente de la República del Paraguay, Nicanor Duarte Frutos, suscribió con el aquel momento mandatario venezolano, Hugo Chávez, el Acuerdo de Cooperación Energética de Caracas (ACEC), que en términos generales aseguraba al Paraguay el abastecimiento de combustible y otorgaba condiciones favorables de financiación, a corto y largo plazo, de hasta 15 años, con dos años de gracia, con una tasa de interés del 2 % flat.
De esta manera, inició uno de los pésimos negocios que encargó en el pasado Petropar. La herencia: nunca se pagó la deuda y hoy el gobierno de Cartes litiga con el acreedor en París la forma de pago de la deuda asumida.
Dos administraciones, la de Duarte Frutos y luego Fernando Lugo pasaron por alto el cumplimiento de las obligaciones asumidas. Venezuela reclama US$ 500 millones en concepto de deuda caída más intereses.
Petropar suscribió con Pdvsa un total de 15 contratos. Al 15 de agosto de 2008, la deuda era de US$ 113,1 millones (vencida: US$ 21,7 millones). De este saldo, US$ 87,8 millones, correspondiente a 3 facturas siguen impagas hasta el día de hoy.
Pocos meses después, ya durante el gobierno de Fernando Lugo, la deuda trepó a la suma de US$ 269 millones (agosto de 2009). Esta deuda se mantuvo impaga hasta nuestros días.
El saldo de la deuda hoy pendiente de pago, comenzó a generarse en el gobierno de Nicanor Duarte Frutos y se incrementó durante la era de Fernando Lugo.