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ASUNCIÓN.- Una vez más, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, demostró que la autocrítica no es lo suyo. Ante los nuevos hechos que reflejan la inseguridad, que se acentúa cada vez más durante su gobierno, habló de que “el crimen organizado ha permeado y vulnerado varias instituciones policiales y estamentos políticos” y agregó que “hubo complicidad y seguramente corrió mucha plata”, enfatizó.
Sin embargo, no esbozó siquiera cuál sería la política para hacer frente a tan grave flagelo, pero sí se expresa “en tono altanero” y parece que sigue mirando en el espejo retrovisor y ve, como siempre, el espectro de Horacio Cartes.
Por otro lado, Mario Abdo Benítez se refirió a este nuevo caso, como si fuera un problema de terceros. “Es un problema de la Agrupación Especializada. No habrá cambio de ministro”, dijo e inmediatamente después ya trató de justificar lo sucedido, que es “fruto del crimen organizado, que permeó todas las instituciones”.
El jefe de Estado también sostuvo que tampoco será cambiado el comandante de la Policía Nacional, comisario Walter Vázquez.
Remarcó que, “lastimosamente, quién sabe cuánta plata habrá corrido ahí para que salga esta gente. Acá hubo complicidad, mínimamente el responsable tiene que ser de las fuerzas policiales”, manifestó.
Agregó que la lucha contra el crimen organizado será constante. “Ellos (por los delincuentes) sabían que una vez que culmine su proceso iban a ser expulsados al Brasil. Ya hablé con los ministros de la Corte para que apuren, todos estamos haciendo una lista de los que tienen procesos, porque no podemos expulsarles en medio de su proceso, tienen que tener un finiquito de su proceso, pero de todas maneras, todo lo que podamos vamos a hacer para expulsarles a todos quienes tienen cuentas en el Brasil”, explicó.
Dijo que, una vez que culmine el sumario a los 18 policías, tendrán que rendir cuentas ante la justicia, dejando entrever que serían castigados los subalternos. Y si el presidente dijo que se habrá pagado mucho, debe ser también para los altos jefes, porque así se maneja la estructura policial. Eso se sabe, aunque no se pueda demostrar.
