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El presidente argentino Mauricio Macri recibió a los máximos representantes de los países integrantes del G20 en Costa Salguero, un predio ferial en la costa de la ciudad de Buenos Aires. El encuentro de 48 horas se desarrolla en un ambiente tenso, con jefes de Estado de los países más poderosos con líos explotando en sus respectivas naciones y pocas probabilidades de llegar a un acuerdo conjunto que salve el encuentro multilateral. Se percibe un clima de alta tensión por la “guerra comercial” entre China y Estados Unidos. La canciller alemana tuvo que regresar a su país por un desperfecto en su avión oficial y abordó un vuelo comercial lo cual retrasó su llegada al encuentro. Minutos antes del encuentro se registró un sismo de 3.8 en Capital y Gran Buenos Aires.
BUENOS AIRES.- El encuentro de líderes genera mucha expectativa, sin contar que los temas de la agenda son claves para el futuro del mundo: alimentación sostenible, perspectiva de género, empleo e infraestructura; aunque en realidad el eje será la guerra comercial entre China y Estados Unidos y el desacuerdo que viene desde la cumbre pasada acerca del, nada más y nada menos, cambio climático.
El jueves ya se evidenció el primer desencuentro: en la tarde, Donald Trump canceló una reunión con Vladimir Putin por la tensión militar entre Rusia y Ucrania.
“La supervivencia del propio G20 es lo que está en juego”, ha explicado el doctor en Relaciones Internacionales Marcelo Saguier. Se refiere así a que esta cumbre es la última salvaguarda de un espacio de multilateralismo tras el giro nacionalista de países como Estados Unidos.
Las últimas semanas han sido particularmente explosivas en la mayoría de estos países, y, Argentina, el anfitrión, vive un momento de tensión social por el incremento de la inflación y el préstamo que tuvo que solicitar al Fondo Monetario Internacional.
Entre otros temas. El primero es el príncipe de Arabia Saudí, Mohammed bin Salmán, señalado por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi y de crímenes de guerra en Yemen. Tras una denuncia de Human Rights Watch que pedía detenerlo durante la cumbre, la justicia argentina solicitó información sobre procesos en el exterior contra el príncipe, que desde su arribo no había salido de su embajada.
Este jueves, durante la reunión bilateral entre Emmanuel Macron y Macri, el presidente de Francia dijo que solicitó un encuentro con sus pares europeos para discutir sobre el caso del periodista asesinado. “El caso es muy grave. Quiero que se conozca la verdad, que las investigaciones en Turquía y Arabia Saudí aporten toda la verdad”, dijo.
