ADN Digital
El diario de la familia Zuccolillo está muy preocupado ahora por lo que está pasando en la zona del abandonado Metrobús.
En su edición sabatina publica en tapa el tema con una gran foto y el título “Metrobús indefinido y descontrolado”. La gráfica es elocuente, en primer plano un sofá viejo roto y tirado por alguien allí como en un basural, más atrás una fila de vehículos iquiqueños en una improvisada “playa de venta de autos”. En el epígrafe, el texto que explica la foto, se lee al final “Hace seis meses que se rescindió el contrato con Motta Engil y no se ha hecho nada más, excepto poner excusas. Ni se define ni se controla”.
La publicación, para decirlo sin ambages, deja en evidencia una vez más el feroz cinismo del diario, ya que los culpables directos de esa suerte de “tragedia ciudadana”, son ellos mismos.
Abc paró esa obra dándole una manija cuasi demencial a los famosos “frentistas” que empezaron a entorpecerlo todo, a impedir directamente el avance de los trabajos, a amedrentar a la empresa constructora con reclamos desmesurados, que violentaban en toda la regla aquello de que “el interés común debe primar sobre el privado”.
Ahora allí está su obra. Deberían vanagloriarse de ella. No criticarla. Eso es lo que consiguieron. Le dieron con todo al proyecto porque el director de entonces tenía intereses económicos- ¡cuándo no!- que no fueron atendidos por el gobierno de HC. El famoso proyecto de tren elevado de AZ que fue desechado y que fue la causa y el origen de todos los males del Metrobús.
Y ahora supuestamente les preocupa, ese “fantasma” que adorna la avenida Mariscal Estigarribia en Fernando y San Lorenzo.
En el material le hicieron además una nota al gerente del Metrobús, quien admitió tranquilamente que el proyecto original ahora ya no es viable. No lo dijo él directamente, lo decimos entonces nosotros: Porque todo el mundo se “armó” para pedir más plata y no se pueden concretar razonablemente las expropiaciones.
¡Y quién fue artífice de todo eso? Abc. Martillando todos los días, publicando en tapa, el “despojo a los frentistas”, quienes llegaron a armar piquetes para impedir que los obreros trabajen y luego denunciaron la demora de las tareas, algo que ellos mismos provocaron.
El diario debería ser distinguido como una suerte de “padrino de honor” por toda esa gente que se benefició con su campaña: los frentistas, abriendo el lote, por supuesto, luego los dueños de los autos que se ofrecen en esa “playita”, los que la usan como basurero, los vendedores ambulantes, los vendedores de frutas y verduras y los que aprovechan los recodos de la obra como mingitorios durante la noche…y en el día en ciertos casos.
Pero también debería ser marcado y despreciado para siempre por esa tremenda legión de gente trabajadora que viene colgada de los colectivos chatarra todos los días para llegar hacia el centro de Asunción.
Hacemos un punto y aparte para anotar bien clarita la cantidad de paraguayos a los que perjudicó la insana campaña de ABC: 250.000 personas que iban a usar el sistema de ida y vuelta a sus casas.
Además se debe anotar la tremenda carga financiera que implica la suspensión “sine die” de las obras. Millones y millones de dólares que se están tirando a la basura…gracias a Abc. Y eso que aún no llegó la demanda por indemnización de la empresa constructora.
¡Así contribuye a construir el país el diario de los Zuccolillo!
Y después se quejan en tapa: ¡Cosecharás tu siembra!