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ASUNCIÓN. Teodolina Villalba, secretaria general de la Federación Nacional Campesina, la mayor organización de labriegos del país, confirmó esta mañana que la movilización prevista para el lunes próximo incluirá cierres de ruta en varias localidades, entre ellas Liberación, Caaguazú y Yasy Kañy.

Días atrás, el ministro del Interior había dicho que si los campesinos persisten en esos cierres de ruta, se negociará con ellos y si no se retiran, se procederá a usar la fuerza para que lo hagan.

En los últimos días surgió la versión de que hay sectores que pretenden desestabilizar al gobierno, entre los que se identificó a la FNC y su movilización, que es la misma de todos los años, con reivindicaciones que ahora incluyen el fin de los desalojos y la represión policial.

Según Villalba, la amenaza de represión en el caso de cierres de ruta surge porque “quieren asustar a la gente en lugar de pensar cómo dar respuestas a los sectores campesinos e indígenas”. Negó además que existe un plan de desestabilización y afirmó que estos rumores surgen cuando no hay respuestas del gobierno a los reclamos ciudadanos.

“No hay plan de desestabilización; es el propio Gobierno que crea problemas con su política de represión y desalojo”, añadió la líder campesina y dijo que esta vez la protesta estará centrada “contra los desalojos y la represión, por una patria nueva”.

Expresó que “permanentemente estamos haciendo llegar nuestros reclamos, pero no hay diálogo. Salir a marchar es el último recurso. Un campesino sin tierra significa miseria, hambre, pobreza y desempleo. El Gobierno se tiene que sentar a dar soluciones. Algunos dicen que nosotros queremos buscar problemas; eso es mentira; nosotros queremos una solución a nuestros reclamos”.