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Las razones son cuando menos dudosas, pues si el argumento real es que se excedió con la prohibición de tratar a pacientes en los pasillos del Instituto de Previsión Social (IPS), hubiera bastado con rectificar la medida y apercibirlo. Un trato muy distinto al que se le dispensa, por ejemplo, a Patricia Samudio, presidenta de Petróleos Paraguayo S.A. (Petropar), no por ser rigurosa en la aplicación de la Ley, sino de violarla. Al parecer, en el gobierno no a todos se los mide con la misma vara, y habrá razones.
ASUNCIÓN.- El Superintendente de Salud, Jorge Rodas, confirmó que a través de un mensaje en el WhatsApp el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, le solicitó que presente su renuncia, por haber prohibido que se atienda a los asegurados en los pasillos de urgencia del IPS.
La destitución de Rodas, sin duda, es discutible y hasta es calificada como exagerada debido a que se pudo haber rectificado la resolución y atender a un enfermo en cualquier lugar, priorizando la vida por sobre todo. No importa el lugar, se debe dar una asistencia, pero siempre buscando mejorar y no dejarla como está.
Pasó poco más 24 horas, tras divulgar la prohibición de que los pasillos del hospital central del IPS ya no sean utilizados para internar a los pacientes, para que el doctor Jorge Rodas, de la Superintendencia de Salud, fuera rajado del cargo.
Ayer, el mismo fue hasta la oficina del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, quien le confirmó que está destituido. “Me dijo que tiene una manera de ver y abordar la salud un poco diferente a lo que yo hago”, explicó Rodas.
El profesional explicó que el ministro es el presidente del Consejo de Salud (organismo al que responde la Superintendencia) le envió un mensaje de WhatsApp para pedirle que presente su renuncia.
Sin duda la decisión del gobierno de rajar a un funcionario por tomar una esta media es exagerada, ya que bien podía haber ser subsanado, exigiendo que lo rectifique. Pero la medida fue tajante, y lo sacaron.
Sin embargo, llamativamente esta no es la actitud que se asume con todos. Como ejemplo se puede mencionar el caso de la titular de Petropar, Patricia Samudio, quien pese a las denuncias de hechos de irregulares, y violando las normas legales se le mantiene en el cargo.
Todo indica que mientras la Samudio tiene una protectora o madrina muy influyente, el doctor Rodas no tenía y por eso fue rápidamente rajado del gobierno.
“Como paraguayo me retiro satisfecho y con poca modestia de haber aportado un granito de arena. Le pedí al ministro que ningún pasillo vuelva a funcionar como internación. Yo no renuncio porque será una cobardía huir, me apartarán, yo le pedí que me aparte del cargo. Yo no sé sus razones verdaderas y tampoco sé quién en particular pidió que me saquen”, señaló el profesional en declaraciones a medios radiales de la capital.
El funcionario al defender su decisión, comentó que internar a pacientes en los pasillos conlleva a una falta de intimidad y pudor, además de no garantizar la bioseguridad. “Esto no es entendible internacionalmente, un servicio de clínica no puede funcionar en el pasillo”, puntualizó.
Así también explicó que sus pedidos de informes generaban mucha incomodidad. “Yo iba a causar problemas y ahora quedan de vacaciones”, remató.
En otro momento, Rodas pidió que se consulte al presidente Mario Abdo qué pasará con la “institucionalización de las instituciones públicas”, que fuera uno de sus fuertes mensajes lanzados en la campaña proselitista y en la asunción al mando.
En la oficina de la Superintendencia de Salud confirmaron que el doctor Rodas ya tenía preparado un listado de centros privados que serían verificados, tras el recorrido realizado en los hospitales públicos, intención que tampoco cayó bien dentro del ámbito de la cartera sanitaria.
