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La bancada oficialista de la Cámara de Diputados, y sus aliados llanistas y del Frente Guasu, dejaron sin quórum la sesión extra convocada para ayer, al confirmar que el presidente, Hugo Velázquez, seguía con su postura de violar el reglamento interno, no sometiendo a votación la aprobación de las actas anteriores, a pesar de ser un pedido planteado por la mayoría.
ASUNCIÓN.- La sesión extra de ayer fue convocada para tratar 2 proyectos fundamentales y que su aprobación ya se ha vuelto imperiosa, el que regula el financiamiento político y el desbloqueo de listas, ya que la idea es que ambas leyes estén vigentes antes de las internas partidarias previstas para diciembre próximo.
En nuestra edición de ayer advertíamos que sería muy difícil la realización de la sesión convocada, puesto que en ella, necesariamente, volvería a surgir el problema de las 3 actas que el oficialismo pretende que se aprueben, a lo que Velázquez, de manera absolutamente irracional, se opone.
Pues es exactamente eso lo que ocurrió. La bancada oficialista y sus aliadas exigieron el tratamiento de las actas de las 3 sesiones extras convocadas la semana pasada, en las que se modificó el reglamento interno, se renovó la mesa directiva y se cambió a los representantes de la cámara ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y el Consejo de la Magistratura.
El diputado Bernardo Villalba explicó a los medios de comunicación que de realizarse una sesión extra sin tratarse la aprobación de las anteriores, se estaría violando el reglamento interno, puesto que es absurdo pensar que estas no existieron ya que existen actas y grabaciones, por lo que la mayoría decidió no responder a la convocatoria.
El problema de todo esto no solo es que, a consecuencia de la irracionalidad de la minoría a la que responde Velázquez, cada vez parece más difícil que las leyes de financiamiento político y desbloqueo de listas estén vigentes antes de las internas, sino que toda la actividad de la cámara está paralizada y pareciera que así continuará hasta que asuma la nueva mesa directiva.
Y todo porque el irresponsable presidente saliente no acepta que ahora pertenece a la minoría y debe aceptar las decisiones de la mayoría.
ALGUNOS RENUNCIAN A COMISIÓN DE CÁMARA BAJA
La manipulación de la minoría de la Cámara de Diputados ha llegado a tal extremo, que ahora pretende paralizar el funcionamiento hasta de algunas comisiones asesoras, por lo menos hasta que asuman las nuevas autoridades de la mesa directiva y se elija a los miembros de estos grupos de trabajo.
Ayer, 5 de los 13 miembros de la Comisión de Asuntos Constitucionales presentaron renuncia a la misma, con el argumento de que el presidente, Ramón Romero Roa, había avalado una actuación inconstitucional de la mayoría al votar a favor de la remoción de Julio Javier Ríos del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.
Esta fuga no afecta el trabajo de la comisión, la cual sigue contando con 8 miembros, más del quórum legal para sesionar, lo que demuestra a las claras que es la minoría la que pretende seguir impidiendo el trabajo institucional de la cámara, con este tipo de incidentes.
Los que renunciaron a trabajar hasta el final de este período son José María Ibáñez, Eber Ovelar, Eusebio Alvarenga, Jorge Ávalos Mariño (quien hace 7 años se benefició con una acción similar a la que ahora denuncia como inconstitucional) y Julio Javier Ríos.
