En las capturas de pantallas se observan los tres momentos más importantes del suceso. La fisonomía del maleante, como se apoderó de las joyas y finalmente donde las guardo.
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Discapacitado roba joyas y luego una mujer las vende por Facebook

El robo de joyas perpetrado por una persona con discapacidad y con un acento extranjero, fue captado por las cámaras de circuito cerrado de un local comercial en un shopping de la capital del país. Con la complicidad de una mujer, quien distrajo a la empleada del comercio, el hombre se apoderó de unas seis joyas por un valor de G. 12 millones. Horas después, una mujer ofertaba las piezas robadas por las redes sociales a precios “regalados”.

ASUNCIÓN.- El pasado martes, según los datos, uno de los locales de Di Prata, ubicado en el shopping Villa Morra, fue “visitado”, cerca de las 16:00 horas por dos personas que se ingeniaron para apropiarse de varias joyas. El hecho quedó registrado por las cámaras de seguridad.

Conforme con los datos, mientras una mujer preguntaba precios sobre algunos productos a la encargada de turno -logrando distraerla de esta manera- se observa a un hombre que se acerca a un costado del mostrador. Primero deja su mochila sobre el estante, luego hace un pequeño recorrido y posteriormente deja recostadas sus muletas por el escaparate.

En las imágenes se pueden ver que inmediatamente el ladrón se recuesta por la vitrina y comienza a treparla, siempre asegurándose que la empleada del comercio no se percate de su actuación. “La señora espectacularmente me distrajo, pero él en medio que le iba atendiendo a la mujer me dijo que quería un gatito con una coronita porque a su novia le gustaba”, acotó la vendedora del comercio.

Después, según las imágenes, el señor trepó al mostrador. La vendedora indicó que le llamó la atención que el vidrio no se haya roto, porque el sospechoso recostó todo su cuerpo para poder llevarse las joyas.  La encargada sostuvo que luego la mujer a quien estaba atendiendo le manifestó que no le gustaba ninguno de los productos y se retiró del lugar. Cuando quiso atender al hombre, ya no lo vio porque había desaparecido de allí.

María explicó que como hace un mes está trabajando en la joyería, no sabe bien la cantidad de productos, por lo que fue su compañera de trabajo quien se percató de la ausencia de algunas mercaderías recién el miércoles. Las mismas luego dieron aviso a la propietaria y directivos del shopping para acceder a las cámaras de seguridad.

Pero, la historia luego continuó cuando esta compañera suya vio que una mujer de Luque, de nombre María Álvarez, ofertaba las pulseras por 350.000 guaraníes cada una mediante los grupos en Facebook denominados Hendyla Paraguay y Clasipar. “Vendo urgente una pulserita de oro 18 k nuevo sin uso valor real sebe por la etiqueta regalado doy (sic)”, escribió la también sospechosa. La entrevistada aclaró que esta vendedora por la red social no es la misma que actuó de distractora durante el robo.

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