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El 11 de abril pasado, el abogado del empresario José Ortiz presentó una querella en contra del presidente del PLRA, Efraín Alegre, quien no desaprovecha ocasión para insistir con que el mismo fue quien ordenó el atropello al local partidario en la noche del 31 de marzo. Pero cuando se le cita presenta excusas para no presentarse porque, obviamente, no tiene ninguna prueba.
ASUNCIÓN.- No es que a esta altura nos sorprenda algo que pudiera hacer Alegre, experto en actuar con irracionalidad e incoherencia. Pero esto ya es demasiado. Resulta que acusó a Ortiz, gerente de Tabacalera del Este y empresario cercano al presidente Horacio Cartes, de ser quien maneja a la Policía y que fue quien ordenó el allanamiento que terminó con la muerte de Rodrigo Quintana.
Ni bien lo supo, ya en abril pasado, Ortiz querelló al liberal y desde entonces se ha intentado una audiencia de conciliación entre ambas partes, pero una y otra vez, el abogado de Alegre pide la suspensión de la acción judicial.
Lo que ocurre es que en esa audiencia, Alegre deberá rectificarse –pidiendo perdón al empresario- o ratificarse, para lo cual deberá presentar pruebas de su acusación. Obviamente, no las tiene y eso hace que pida la suspensión de la audiencia, a lo mejor con la intención de que venzan los plazos procesales.
No debe ser la primera vez que alguien lanza una acusación sin fundamentos y luego intenta eludir a la Justicia cuando el afectado exige un resarcimiento. Lo increíble en este caso es que, mientras se esconde e inventa excusas para no encontrarse cara a cara con Ortiz, Alegre lo sigue acusando de ser quien maneja a la Policía.
Para colmo, no solamente se ratifica –mediáticamente, porque a la Justicia, hasta ahora, le hace pito catalán- en sus acusaciones, sino que, además, despotrica en contra de la Fiscalía asegurando que los agentes pretenden proteger a Ortiz por ser hombre de confianza de Cartes. No entendemos cómo van a actuar los fiscales y jueces si él no se presenta a las audiencias a las que es convocado.
Pero este no es el único caso en el que está involucrado Alegre, sobre todo en lo que hace a los expedientes abiertos por los hechos ocurridos el 31 de marzo pasado. También se lo investiga por haber estado detrás de lo hecho por sus operadores políticos al enfrentarse a los policías e invadir la sede del Congreso, que terminó incendiada. En todos los casos denuncia a la Fiscalía por complicidad con el gobierno pero, así también, en ninguno se presenta cuando es convocado por la Justicia.
