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ASUNCIÓN.- A 5 días de las internas liberales, uno de los candidatos, Efraín Alegre, continúa perdido en el espacio. Toda su campaña está centrada en atacar al gobierno de Horacio Cartes como si el jefe de Estado fuera su verdadero rival. Lo único que esto demuestra es que le interesa poco la Presidencia del PLRA, salvo como puente para llegar a las elecciones de 2018.
Los candidatos a cargos electivos en el PLRA podrán hacer campaña hasta el jueves, dentro de 2 días, y luego entrará a regir la veda electoral hasta el domingo, cuando se realizarán las elecciones del nuevo presidente del partido, miembros del Directorio, mesas directivas de los comités de todo el país y convencionales partidarios.
Así que lo que debía hacer Efraín era intensificar su discurso demostrando por qué es el mejor candidato y contando cuáles serán sus planes de gobierno cuando asuma como presidente del partido.
Pero está tan perdido, o es tan malintencionado, que no puede siquiera disimular su verdadero objetivo, la Presidencia de la República. Porque la verdad es que a Efraín le interesa muy poco lo que pasa en el PLRA; lo único que le interesa del cargo por el que competirá el domingo es que podría ser un puente que le posicione políticamente para convertirse en candidato en las elecciones generales de dentro de 2 años.
Así que todo su discurso es en contra del jefe de Estado, que no tiene nada que ver en las internas liberales, pero se ha convertido en un protagonista inesperado ya que, por lo visto, los candidatos tienen tan poco que ofrecer que prefieren tirotear al gobierno en lugar de presentar sus propuestas a sus correligionarios, que son los únicos interesados en los comicios del domingo.
El más intenso en esto es Alegre, quien, encima, es tan caradura que denuncia a Cartes y a los liberales que trabajan con él, por deshonestidad y se olvida de que la Justicia tiene 2 causas en contra suya, una por el negociado de la conocida como “ruta de la mentira”, la 13, que une Caaguazú a Yhú y Vaquería, que jamás se construyó, pero, cuando era ministro de Obras Públicas, Alegre pagó un millonario anticipo de 7,5 millones de dólares.
En la otra causa, un grupo de liberales lo denunció junto con el diputado Juan Félix Bogado Tatter por lesión de confianza y estafa, por haber entregado 3 mil millones de guaraníes a una empresa para que realizara obras que jamás fueron realizadas.
