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BRASIL.- El dueño de una fábrica de cerámicas en bancarrota, Sadi Gitz, se disparó en la cabeza cuando el gobernador del estado de Sergipe terminó de dar su discurso.
El lamentable suceso ocurrió en presencia del gobernador de Segipe, Belivaldo Chagas y el ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, quienes participaban en una acto de inauguración de un seminario sobre el mercado del gas en Aracaju.
O momento do suicídio no Simpósio do Gás em Sergipe, empresário dono Escurial tirou a própria vida em hotel na Orla de Aracaju
Sadir Gitz estava desesperado após fechamento da empresa por falência pic.twitter.com/mvhQ3ZECXP— Jailton Santana (@JailtonSantana_) 4 de julio de 2019
Según el diario brasileño Estadao, el empresario Sadi Gitz se puso de pie después del discurso del gobernador, le dijo unas palabras y se suicidó con un arma calibro 38.
Gitz era dueño de una fábrica de baldosas de cerámica que se llamaba Escurial. Y hace al menos dos meses suspendió sus actividades debido al alto precio del gas. A causa de esto, la empresa cayó en bancarrota.
El gobernador Chagas lamentó la muerte del empresario. “Sabíamos que Sadi tenía problemas de carácter financiero, por problemas con su empresa. Venía conversando con la Sergas (compañía de gas del estado de Sergipe) y lamentablemente en un momento de debilidad cometió el suicidio”, dijo el gobernador Chagas a los medios locales.
El periódico Estadao afirma que Gitz llamó de “mentiroso” al gobernador antes de suicidarse.
Sadi Gitz tenía 70 años y en mayo de este año decidió suspender las actividades de la fábrica de recubrimientos cerámicos Escurial. Sacó un comunicado de prensa en donde culpó al gobierno estatal por la medida. “La razón determinante de esta decisión fue el precio del gas que cobró Sergas, una empresa del gobierno del estado de Sergipe”, aseveró. A causa del cierre, 200 personas perdieron el trabajo de forma directa y otros 400 de forma indirecta.
Además, Gitz había demandado a Sergas ante la justicia por el abusivo precio, según él. Incluyó también un “recamo por daños y perjuicios”.
Por su parte, el gobernador Chagas echó la culpa a Petrobras por los altos precios del gas cobrados por Sergas.
