En la búsqueda de solución al problema ambiental que representan los desechos de los criaderos de porcinos, el productor Mariano Sanchez decidió elaborar el biogás en su propio establecimiento, ubicado en la comunidad de Bonanza distrito de Yatytay, del departamento de Itapúa, distante a unos 120 kilómetros de Encarnación. El gas obtenido es óptimo para el uso doméstico y vehicular que a la vez aporta un gran alivio para la economía familiar, sostuvo.
YATYTAY, Dpto. de Alto Paraná (Por Fabian Sanchez).- Debido a la preocupación que generaba el criadero de cerdos en su establecimiento por la cantidad de excrementos que desechan diariamente unos 600 cerdos, decidieron emprender un proyecto para aprovechar el estiércol y generar biogás.
El emprendimiento resultó ser todo un éxito, manifestó Sanchez.
Explicó que al consultar con el experto en la materia, Ing. Agr. Juan Alfredo Sanchez, y después de realizar los cálculos del presupuesto decidieron invertir un importe de 25 millones de guaraníes para el desarrollo del proyecto que implicó la instalación de los tiberios para la conducción de los excremento hacia una fosa donde fueron instalados 4 enormes cilindros de plásticos llamado biodigestor.
El estiércol de cerdo es mesclado con agua, proceso que va desde el criadero, por las tuberías que desembocan en los gigantescos tambores denominados biodigestor. El periodo de fermentación es de una semana. Una vez fermentado, se deriva el gas para su utilización através de las tuberías encargadas de transportar el gas natural hasta la cocina, para uso doméstico.
Doña Venancia Barrios, madre de Sanchez, destacó la efectividad de biogás, y afirmó que lo viene utilizando desde hace unos diez días en que el proyecto empezó a funcionar a modo de prueba, la ama de casa está muy satisfecha con el logro obtenido, que además implica no volver a comprar gas.
Cabe destacar que la cantidad de gas producida en la finca puede abastecer a varias familias, tanto para el uso doméstico y vehicular. Los emprendedores pretenden sacarle el máximo provecho, utilizando para la iluminación de la finca, calefactores y otros.
Gracias al tratamiento de los residuos, con una mínima inversión el productor agropecuario ha logrado disminuir drásticamente los olores generados en los criaderos y así también dar un gran alivio para la economía familiar.