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ASUNCIÓN.- El proyecto de enmienda sería presentado en 2 semanas en el Senado, donde ya se cuenta con los votos necesarios para aprobarlo y remitirlo a Diputados para su revisión. La evidencia de esta situación hace que disidentes y opositores se encuentren desesperados y ahora invaden los medios de comunicación anunciando que el tema pierde fuerza.
Los que más hablan de la enmienda son quienes se oponen a ella. Desirée Masi y su grupete de senadores están tan obsesionados que aprovechan cualquier espacio público para lanzar diatribas cada vez más duras hacia quienes presentarán el proyecto en pocos días más.
Por supuesto, la complicidad de los medios “independientes” es decisiva para esta campaña, así que todos los días las tapas de los diarios tienen títulos catástrofes anunciando todos los males que le aguardan al país si es que ocurre la desgracia de que la enmienda sea aprobada por las cámaras del Congreso. Lo que parecen no recordar es que luego de superar esta fase, el proyecto tendrá que enfrentarse a su desafío más grande, el referéndum ciudadano. Por lo visto, piensan que allí también ganará el SÍ.
En una entrevista radial, el diputado colorado Clemente Barrios ratificó que el proyecto de enmienda está listo y será presentado en pocos días más. Aseguró que lo único que se hará será cumplir con el mandato partidario de impulsar la reelección por los mecanismos constitucionales adecuados.
No dio mucha importancia a la campaña antienmienda de disidentes y opositores y aseguró que es sabido que este grupo se opone sistemáticamente a todo lo que hace el gobierno.
El sector antienmienda sintió que las pocas esperanzas que le quedaban de evitar el tratamiento del proyecto se evaporaban cuando hace 2 días, el presidente del Senado, Roberto Acevedo, dijo que daría entrada al documento y dejaría que el plenario decida. En realidad, es lo único que puede hacer aunque de manera prepotente y siguiendo indicaciones de Masi había dicho anteriormente que no permitiría el ingreso del tema a la cámara. Así que no les queda más remedio que poner las barbas en remojo ante lo que se viene y, ya saben, no podrán evitarlo.
