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ASUNCIÓN.- Los expresidentes de la República deberían tener la posibilidad de postularse como senadores activos y no conformarse con el vitaliciado, según Fernando Lugo, quien no tuvo problema en postularse por no haber terminado su mandato a causa del juicio político en su contra. Según el exobispo, es un desperdicio no aprovechar la experiencia de quienes estuvieron en la Presidencia de la República.
El único expresidente que asumió como senador de la Nación es, precisamente, Lugo, aunque su situación es diferente a la de los demás jefes de Estado, puesto que no terminó su mandato por haber sido separado del cargo vía juicio político, por lo cual no podía asumir como vitalicio, tal como lo dispone la Constitución Nacional.
El oficialismo colorado pretende que Horacio Cartes sea el candidato número 1 a la Cámara de Senadores, algo que, según otros sectores, no puede ser posible ya que la Constitución dice que los expresidentes serán senadores vitalicios.
Esto no tiene sentido, ya que el texto constitucional da como opción el vitaliciado, pero no prohíbe en ningún lado que un expresidente se postule como senador activo. El problema fundamental que tiene la senaduría vitalicia es que quien ocupe esa banca no tiene ningún peso político ya que ni siquiera cuenta con voto. Es decir que puede hablar pero no decidir sobre cuestión alguna que se ponga a consideración de la cámara.
Lugo insistió en que “es un desperdicio que no puedan ser senadores activos, ya que los que pasaron por el Poder Ejecutivo pueden enriquecer el debate”.
Ya en su momento lo intentó Nicanor Duarte Frutos, quien no solamente fue habilitado como candidato al Senado por la Corte Suprema de Justicia, sino que resultó electo como legislador por la lista de la ANR, a pesar de lo cual nunca pudo jurar en el cargo, puesto que legisladores que no pertenecían a la bancada colorada no dieron quórum a pesar de 3 intentos.
