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Los familiares de los albañiles y electricistas que fueron abatidos días atrás por la Policía Nacional en la localidad de Karapa´i, departamento de Amambay, durante el operativo Romai, al considerarlos narcotraficantes, anunciaron que realizarán una autopsia sin participación fiscal ni policial. Por su parte, el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, ratificó que todos los fallecidos dispararon primero a los intervinientes.
ASUNCIÓN.- El operativo Romai que dejó como saldo 5 fallecidos, 6 detenidos y una docena de prófugos, supuestamente narcotraficantes, realizado el 1 de mayo pasado en la colonia Piray, del distrito de Karapa´i, sigue teniendo sus repercusiones. Ayer los familiares de los fallecidos realizaron una conferencia de prensa en la Cámara de Senadores, antes de realizar una denuncia formal ante Ministerio Público por mal procedimiento de la Policía porque aseguran que sus allegados eran inocentes.
Del encuentro participaron Iris Benítez, viuda de Pablo Javier Ocampos, quien perdió la vida en la refriega, y asegura que su marido era albañil y no estaba involucrado en nada ilegal. Además, estuvo presente Perla Duarte, madre de Richard Alexander Fernández Duarte, otro de los abatidos durante la operación.
Por su parte, el contratista Marcial Sanabria manifestó que los abatidos eran sus compañeros que estaban construyendo una vivienda en el predio allanado por los agentes uniformados. Comentó, “nuestro objetivo era la construcción. Hace cuatro meses estuvimos en la construcción. Nosotros jamás tocamos armas.
Agregó que Roberto Portillo, propietario de la vivienda, lo contrató para construir lo que se presume que sería un laboratorio de drogas, según los investigadores. “Nosotros vivíamos ahí porque era lejos ir a nuestras casas y volver. No sabía si había armas en el lugar, yo no llegué a ver. No veíamos quién entraba o salía del lugar porque desde la madrugada nos íbamos a la obra y regresábamos de noche”, dijo. Además aseguró que su personal no portaba armas durante el operativo desplegado.
Perla Duarte, madre de Richard Fernández, uno de los fallecidos, aseguró que lo que hicieron los policías fue ejecutar a los trabajadores, y exige a las autoridades de seguridad nacional que entreguen las grabaciones que, considera según el protocolo, tenían que haber hecho los intervinientes.
“No voy a dejar que le toque ni un forense de la Fiscalía; en privado voy a mandar hacer y voy a limpiar el nombre de mi hijo”, dijo.
Por su parte, Iris Gil Benítez, la viuda de Pablo Javier Ocampos (otro de los fallecidos), resaltó que su marido solo se encargaba de la albañilería y exigió que se practique la autopsia. “Puede que haya criminales entre ellos, pero inocentes no pueden pagar por eso. Nosotros no nos vamos a quedar de brazos cruzados, vamos a hacer todo lo que corresponde y a denunciar”, ratificó.
POLICIA FUE RECIBIDA A TIROS, REITERÓ VILLAMAYOR
El ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, con respecto a la denuncia de los familiares de los abatidos durante el operativo “Romai” realizado el 1 de mayo pasado en la localidad de Karapa´i (Amambay), dijo: “los únicos inocentes eran los policías que participaron del operativo” y agregó que los fallecidos fueron los que dispararon primero. Esto se comprobó, según indicó, mediante las pruebas de nitrito y nitrato que se practicaron a los cadáveres.
El secretario de estado, mencionó que los supuestos albañiles no quisieron entregarse ni bajar las armas, y disparaban sin tregua a los policías. “Los abatidos se enfrentaron a los policías. Nadie levantó la mano para decir me rindo. Los heridos fueron capturados, no es que se rindieron. Muchos se dieron a la fuga”, manifestó Villamayor.
Según el titular del Ministerio del Interior todos los que estaban en el establecimiento prestaban un servicio al Comando Vermelho, ya sea con trabajo sucio o de albañilería. “Si vas a la casa del líder de las FARC, tenés que ser de confianza para que te permitan entrar”, ratificó.
