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Mientras Fernando Lugo sigue deshojando margaritas, su abogado, Marcos Fariña –el principal impulsor de los delirantes modos como el exobispo podría volver a postularse- parece haber decidido pisar tierra y ahora pide a su jefe que apruebe la enmienda que le permita volver a postularse a la Presidencia de la República en abril del año próximo.
ASUNCIÓN.- Fariña fue protagonista de todas las hipótesis según las cuales Lugo estaba habilitado por la Constitución para ser reelecto presidente de la República. Planteó que el artículo de marras solo habla de presidentes y no expresidentes, que no estaba inhabilitado porque no había terminado su mandato y alguna otra joyita que lo que despertó fue la burla de los demás sectores.
Cuando el Tribunal Superior de Justicia Electoral dijo que Lugo estaba incluido en las generales de la ley y no podía volver a postularse en tanto no hubiera reelección, fue Fariña el que recurrió a la Corte Suprema de Justicia para pedir una certeza constitucional que habilitara a su cliente.
Pero parece que al fin le cayó la ficha, y se dio cuenta de que la única vía legal y legítima para que Lugo pueda volver a ser candidato a presidente es la enmienda. El problema es que mientras él entró en razón, el exobispo sigue en sus trece, diciendo que no pero sí, rechazando la enmienda, pero asegurando que la utilizará al ser aprobada.
En una entrevista radial, Fariña dijo ayer que “Lugo sabe que puede ser tratada la enmienda sin inconveniente”, lo que desmiente a su jefe, quien sigue insistiendo que es una vía inconstitucional ya que la reelección solo puede ser tratada vía reforma constitucional.
Y fue aún más lejos agregando que “creo que debe acompañar y votar a favor”, todo un sorpresivo giro en la postura del abogado.
Fariña aseguró que el proyecto de enmienda está listo para ser presentado al Senado, e insistió en que Lugo debe apoyarlo. “Si el pueblo te pide, uno tiene que saber oír. Él sabe que puede ser tratada la enmienda sin ningún tipo de inconveniente. Yo creo que debe rever esa posición; debe acompañar y votar a favor de la enmienda”, concluyó.
Fariña se suma al primer anillo de Lugo que ya días atrás le pidió que descabalgue de la postura que ha mantenido hasta ahora y asuma un compromiso público con el proyecto de enmienda, habida cuenta que será uno de los principales beneficiados con ella.
