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La festividad de la Candelaria, en Areguá, está en pleno desarrollo. Esta semana, el 2 de febrero será el día central de la celebración en honor a la Virgen. Esta ciudad capital del Departamento Central, es la tierra de la frutilla y la artesanía en barro, pero en ella se desparraman los más variados atractivos. Está ubicada a menos de 30 km. de Asunción a orillas del Lago Ypacaraí.

AREGUÁ (Dpto. Central).- El caso de esta ciudad constituye una paradoja. Siendo una comunidad pequeña, con apenas alrededor de 70.000 habitantes, es la capital del departamento más poblado del país, como lo es Central.

Asimismo, a pesar de ser una pequeña población, no le falta nada para ser muy atractiva, pero sus bondades no son muy difundidas. A más de ser la ciudad de la frutilla y la artesanía en barro, es un pedazo de nuestro país que realmente cautiva.

Conserva recuerdos de antaño, construcciones coloniales, la vieja estación del Ferrocarril, hermosos paisajes, senderos que contagian paz y tranquilidad, bañada por el mítico y legendario lago Ypacaraí, sus cerros Kôi y Chorori, su imponente Iglesia construida por orden de Francisco Solano López en el año 1862.

Y como si todo fuera poco, conserva la Estación Terrena, que fue todo un ícono en materia de tecnología en Paraguay. Sitio desde donde se empezó a comunicar con el mundo, comendando a funcionar en el año 1978.

Pero esta semana la concentración será en la plaza del templo de la Virgen de La Candelaria, desde donde se tiene una vista espectacular de lo que es la ciudad y magestuoso lago Ypacaraí. La festividad patronal se caracteriza por su gran solemnidad y masiva presencia de devotos, cada 2 de febrero. Además, desde el pasado 23 se realizan actos culturales, artístico y cuenta con la participación de agrupaciones locales y de municipios vecinos.

Actualmente la Municipalidad local, en conjunto con la Secretaría de Cultura, proyectan reconvertir el centro de la ciudad, con la reubicación de los artesanos y la construcción de espacios de recreación. “Paseo del Lago, eje turístico, cultural y natural” se denomina el proyecto que apoyan varias instituciones.

Se conformó la denominada “Mesa de Planchar” y la Secretaría Nacional de Cultura ya realizó jornadas de socialización de la Ley N° 5.621/16 “De Protección del Patrimonio Cultural”.

Los trabajos se desarrollaran en dos etapas. La primera: desde la Iglesia la Candelaria hasta la estación del tren y la segunda: desde la estación hasta el lago Ypacaraí. Se prevén instalar jardines temáticos, manteniendo los camineros y frondosos árboles para que turistas y lugareños disfruten del espacio verde y de diversas actividades.

Un sociólogo se encargará de reubicar a los artesanos que generalmente ocupan el paseo central en varias épocas del año, para comercializar sus productos.

SANTUARIO NATURAL Y CASTILLO

Puede ser injusto al referirse a esta ciudad destacar solamente dos sitios, pero puede considerarse que en ellos se reflejan dos épocas que contrastan dentro de los atractivos principales de la ciudad. Son el Santuario San Miguel Arcángel y el castillo Carlota Palmerola.

El primero se encuentra inmerso en la naturaleza, con camineros y jardines arreglados. Está ubicado en el centro mismo y es también conocido como “Oratorio de Ita’o”. El ambiente que lo rodea es paradisíaco y su fiesta es el 29 de setiembre, congregando a miles de personas, muy lejos de lo pagano o comercial. Se mantienen las costumbres de una forma espiritual y más religiosa.

Mientras tanto el castillo Carlota Palmerola es un edificio de inspiración medieval, siendo uno de los más representativos de Areguá. Fue construido en el siglo XIX, junto a una capilla. Su nombre proviene de la propietaria, “Doña Carlota”, quien donó el edificio al Arzobispado, que asignó la propiedad a las hermanas dominicas, quienes actualmente tienen un museo y una casa de retiro. Dentro del lugar se encuentran mobiliarios de época, fotografías, atuendos y pertenencias personales de la familia Palmerola.