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ÑUMÍ.- Las excavaciones ejecutadas en Ñumi, Guairá para encontrar restos óseos que podrían pertenecer a la joven asesinada Teresita Lichi, finalizan este miércoles luego de tres días de investigaciones.
Los resultados de los estudios laboratoriales y del análisis de un antropólogo confirmaron que los restos óseos encontrados el pasado lunes en el inmueble pertenecen a animales, y no a Lichi, como estimaban los investigadores.
La fiscal de la causa, Noelia Soto dijo que todavía no se puede descartar que los huesos hallados el lunes sean de la víctima, teniendo en cuenta que lo encontraron en la vivienda perteneciente al padre de Guillermo Saúl González Villalba, exnovio de Teresita y principal sospechoso de su muerte.
Las excavaciones se realizaron en 1.000 metros del sitio donde encontraron el cráneo de Teresa Lichi en 2012, luego de que un poblador denunciara que halló una mano mientras cultivaba eucaliptos.
Teresita Lichi desapareció el 17 de abril del 2012 al salir de su casa en Coronel Martínez rumbo a Villarrica. A unos 100 días después encontraron su cráneo a metros de la propiedad que hoy está siendo investigada.
En marzo pasado, desconocidos incendiaron los vehículos que estaban ubicados en garaje del abogado Ángel Ruiz Díaz, quien representa a la familia de Teresa Lichi.
