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ASUNCIÓN.- La orden judicial para que seis acusados de sicariato por Fiscalía y Policía guarden prisión domiciliaria, desató una nueva tormenta entre los tres estamentos.
El juez Manuel Marcos Fernández fue el que ordenó que los seis presuntos sicarios cumplan en sus casas la prisión previa al inicio del juicio.
“Antes que nada me sorprende la calificación de sicarios contra estas personas, sobre las cuales no existen elementos que ameriten seguir manteniéndoles en prisión preventiva” expresó el juez Fernández a la emisora Abc Cardinal.
Sobre el hecho de que los seis beneficiados por la alternativa domiciliaria tenían armas en su poder, el magistrado sostuvo que todas estaban registradas por la Dirección de Material Bélico (Dimabel) por lo que tampoco incurrieron en ilegalidad alguna.
Cuando se le indicó que dos de los seis beneficiados fueron objetos de un operativo rescate de la cárcel de Pedro Juan Caballero, el juez Fernández manifestó que esa perspectiva solo está en la categoría de sospecha tanto a nivel policial como fiscal.
Los seis “agraciados” pertenecen al grupo de quince detenidos en un operativo policial y fiscal, en el que también se incautaron armas largas y de grueso calibre.
