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CIUDAD DEL ESTE.- Los gerentes de la Fundación Tesãi dieron la bienvenida al grupo de 11 profesionales médicos, enfermeros y personal de blanco que pertenecen a la Foundation For Hospital Art de los Estados Unidos, que cumplieron una extensa jornada con actividades lúdicas en el Hospital del Área 2.

Los mismos interactuaron con los pacientes internados y ambulatorios enseñando a pintar cuadros como una forma de terapia placentera y gratificante, utilizando las expresiones artísticas para hacer más llevadera la estadía de los pacientes, poniendo color, vida y esperanza en los consultorios y pabellones del nosocomio en el marco del proyecto Paintfest que lo realizan en diferentes países de Sudamérica.

El ambiente fue mucha alegría y entusiasmo en donde participaron médicos del hospital, enfermeros, personal de servicio y otras dependencias, sumado a pacientes internados en pabellones y ambulatorios, que destacaron esta iniciativa traída por la Gerencia del Hospital que desde hace meses se encontraba en tratativas con la Fundación Americana a fin de posibilitar su venida a Ciudad del Este, luego del recorrido por otras capitales y ciudades del Cono Sur.

“Una experiencia maravillosa para todos, hace cuatro días que estoy internada, esto me distrajo mucho, es una terapia que me relaja y mejora mi estado de ánimo. Los enfermos estamos a veces estresados y esto nos pone una gotita de alegría”, dijo Elva Gauto Vda. de Rodríguez, usuaria del centro asistencial.

Dijo además, “es buenísima esta iniciativa, agradezco a los gerentes de la Fundación Tesãi que veo que han mejorado mucho la infraestructura y la calidad del servicio en varios aspectos, un mejor trato y por sobre todo una atención personalizada que marca la diferencia. Felicitaciones para todos los organizadores”, señaló la mujer convaleciente.

“Una terapia que cura el alma”

Por su parte, la Sra. Gisell Santamaría, quien vino acompañada de su hija fue una de las primeras voluntarias en acercarse al taller de pintura realizado en el estar médico del Hospital del Área 2. Emocionada manifestó que la actividad es edificante porque cura el alma y nos hace mejores personas a través del arte. “Feliz vine con mi hija de Presidente Franco para participar. Estos hermanos americanos vienen con buenas ideas para que podamos copiar y replicarlo en todos los servicios de salud, llevando un poco de alegría a los enfermos”, refirió la mujer.

La Fundación que tiene asiento en Woodstock, Georgia (EE. UU) pero con presencia en decenas de países del mundo trabaja hace más de 30 años con la donación de arte para iluminar las paredes de las instalaciones de establecimientos hospitalarios, dando vida y color a ambientes sobrios y melancólicos, pintando un manto de esperanza de un mañana mejor en recintos de atención a la salud.