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El novísimo frente anticartista integrado por dirigentes colorados que están enojados con el presidente por no haber sido tenidos en cuenta para algún cargo público, el único objetivo que parece tener es convertirse en un muro de los lamentos, como si las lágrimas y el enojo hayan llevado a alguien, alguna vez, a ganar una contienda electoral. No tienen ninguna base más que el resentimiento y sus propuestas son inexistentes.
ASUNCIÓN.- Todos contra Cartes parece ser la consigna de este frente que pretende conseguir votos de los colorados hablando mal del prójimo. Ningún medio de comunicación que se precie de serio y honesto podría dar espacio a estos políticos resentidos, que no tienen otra forma de manifestar su rabia que unirse entre ellos para atacar a un enemigo común, el jefe de Estado, y no por no hacer un buen gobierno sino porque no apoyó la candidatura de ninguno de ellos para algún cargo electivo.
El primer resentido es Mario Abdo Benítez, que hasta ahora no ha podido perdonar a Cartes por no haberle escogido como su candidato para la Presidencia de la ANR en el 2015. Su enojo fue tan grande que creó un movimiento interno del partido y organizó un grupete en el Senado al solo efecto de atacar de manera despiadada al presidente y sus obras de gobierno.
Últimamente se han sumado otros, como el vicepresidente de la República, Juan Afara, y el senador Luis Castiglioni, ambos por el mismo motivo; no fueron tenidos en cuenta para ser candidatos de Honor Colorado en las internas de diciembre.
Otro que decidió abandonar la carpa oficialista después de casi 4 años es el presidente de Diputados, Hugo Velázquez. Aunque oficialmente dice que es porque no está de acuerdo con la candidatura de Santiago Peña, lo cierto, de acuerdo a nuestras fuentes, es que está molesto porque HC no lo tuvo en cuenta para la lista de candidatos a la Cámara de Diputados, y él está decidido a conseguir su recutu a cualquier precio.
Otro de los plañideros es Nicanor Duarte Frutos, pero con él no hay nunca demasiada lógica. Se opone a Cartes porque pensó que sería su contendiente en las internas, siempre y cuando se hubiera aprobado la enmienda; y ahora lo hace porque le da la gana.
Lo cierto es que ninguno de ellos tiene en mente un plan de gobierno, una propuesta alternativa a la del oficialismo, un programa que pudiera interesar al electorado colorado, al que consideran tan primitivo que piensan que solamente hablando mal del presidente conseguirán el voto de sus correligionarios. Menuda sorpresa les espera en diciembre.
VELÁZQUEZ Y CASTIGLIONI ¿VIERON LA LUZ?
En un rápido acto de magia, Hugo Velázquez y Luis Castiglioni pasaron de ser traidores a los principios de la ANR a salvadores del partido. Por lo menos esto es lo que se puede concluir al escuchar hablar a los plañideros que se juntaron en un frente para llorar sus penas y lamer sus heridas.
Estos dos exoficialistas pertenecieron al movimiento de Horacio Cartes durante casi 4 años. En el caso de Castiglioni, su única objeción al presidente fue el proyecto de enmienda. Ahora decidieron quemar sus naves y cambiar de carpa, mimetizándose inmediatamente en disidentes y anticartistas. Así que ahora dicen exactamente lo contrario a lo que dijeron durante todos estos años y repiten como loros la letra que les baja Nicanor Duarte Frutos, que muestra a Honor Colorado como si sus integrantes fueran traidores a los principios de la ANR, de los que se erigen sus defensores y salvadores.
Lo más gracioso de todo esto es que no hay ningún gran gesto de patriotismo en ninguno de ellos. Velázquez quiere volver a ser diputado y Castiglioni sigue firme en el sueño que mantiene desde el 2007, ser candidato del partido a la Presidencia de la República. Cartes les dijo nones a ambos, así que agarraron sus petates y se marcharon a probar suerte en la vereda de enfrente.
