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ASUNCIÓN.- Siempre dispuesto a llamar la atención, Rodolfo Friedmann pretendió que el Senado trate un proyecto de su autoría, que modifica la ley de jubilación de los legisladores, pero solo fue apoyado por 3 legisladores más. Lo que quedó evidente es que el guaireño ni siquiera tiene el apoyo de su bancada, ya que fue duramente recriminado por el líder del bloque, Enrique Bacchetta, en dos ocasiones.
Primero, al plantear el cambio del régimen de jubilación de los legisladores, el líder le dijo que era un proyecto populista, y que, si bien no se oponía a que se introdujeran modificaciones en la ley, estas debían ser analizadas en un proyecto que tuviera rigurosidad técnica.
La siguiente ocasión fue cuando Friedmann empezó a cuestionar que no se traten las leyes anti lavado, especialmente la que se refiere a las acciones de las sociedades anónimas, por la supuesta intención del presidente de Legislación, Sergio Godoy, de dilatarlas a fin de proteger los intereses de Horacio Cartes, y pidió que el senador por Honor Colorado se retire del proceso. Indignado ante el hecho de que ninguna de sus propuestas obtiene apoyo, ni siquiera de su bloque, se descontroló al final de su discurso y acusó a Godoy de ser un traficante de influencias; “que se deje de joder con su trajecito de 3 mil dólares y su cara bonita. Que se vaya a la puta”.
Godoy no cayó en el juego de las agresiones y se limitó a explicar el procedimiento que el paquete de leyes tienen en las comisiones que lo analizan, pero de nuevo el líder de la bancada oficialista, Bacchetta, criticó duramente a Friedmann, diciéndole que “con este tipo de actitudes, tratando de dejar mal a la cámara, no vamos a llegar a ningún lado”.
Además, le informó que ya en la legislatura anterior se había decidido acabar con las sociedades anónimas en el Paraguay, y que solo había quedado un 10% de las acciones nominativas, que es el punto que ahora se discute en las comisiones.
