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Nadie entiende qué está pasando en torno a un tema que ni siquiera estaba en discusión, pero todos coinciden en que se generó, innecesariamente, un ambiente de malestar y confusión. Dirigentes del PLRA y el PDP, aliados al oficialismo, se hicieron eco del amplio rechazo de sectores juveniles a la aplicación de sanciones para quienes incumplan con el Servicio Militar Obligatorio (SMO), aprovechando la situación para intentar proyectar cierto perfil opositor. El general (SR), Alfredo Machuca, cuestionó la improvisación de las autoridades en esta materia.
ASUNCIÓN.- No queda claro si este es un elemento de distracción ideado para que la ciudadanía deje de fijarse en temas clave como el retroceso que experimenta la economía o la creciente inseguridad, la falta de liderazgo del presidente actual y el duro enfrentamiento entre los sectores internos colorados.
Si esa fue la intención, les salió muy mal ya que les surgió una crisis que nadie esperaba y que genera mucha mayor belicosidad en la ciudadanía, bastante harta ya del calor y de la poca acción positiva del gobierno.
Las largas filas de jóvenes dispuestos a inscribirse como objetores de conciencia, las críticas de todos los sectores políticos y sociales, y el convencimiento de que lo único que pretende el gobierno es conseguir plata atacando a los que menos tienen, son aspectos que jamás se les ocurrió pensar a los grandes “estrategas” de la puesta en vigencia de una ley que, jamás fue derogada, pero a la que hace años no se utiliza como excusa para conseguir chicos a los que utilizar como servicio doméstico de las casas de los poderosos generales.
Según el general Machuca, si bien es cierto que tanto el SMO como la objeción de conciencia están vigentes, no es menos cierto que la situación resulta bastante improvisada y genera malestar en la población.
“De repente viene una idea fuerza como parte de una propuesta electoral del actual gobernante; viene a quererse implementar de una forma hasta improvisada, una situación que es muy sensible para toda la ciudadanía y especialmente para esa franja etaria de 18 a 26, 30 años, los más jóvenes. Yo creo que lo que se debería hacer es planificar muy bien cómo llevar adelante la implementación de estas dos situaciones (el SMO y la Objeción de Conciencia)”, expresó.
Añadió que “no se puede improvisar una situación en donde le crea más incertidumbre, caos y confusión a la gente, que certeza y certidumbre, con respecto a cómo cumplir estos dos artículos constitucionales que ya tienen su reglamentación”.
“ES UNA MEDIDA DESATINADA”
ASUNCIÓN.- El senador Pedro Santa Cruz, que milita en el Partido Democrático Progresista, uno de los aliados del gobierno, lo criticó duramente por haber generado el conflicto con el Servicio Militar Obligatorio y el anuncio de que se aplicarán multas a quienes no lo cumplan o hayan cumplido. Dijo que en lugar de tocar el bolsillo del pueblo, tendrían que cargar más impuesto a los ricos, a los “señores feudales”.
De manera contundente, el legislador dijo que la decisión gubernamental, “desde todo punto de vista es una medida desatinada”.
Además, criticó la ineficacia del gobierno en el manejo del tema “y como consecuencia de ello, nuevamente se apunta al bolsillo del ciudadano común ya sea a través de las tasas o la multa que se contempla en la Ley de Objeción de Conciencia”.
Reconoció que se necesita duplicar la recaudación a través de los impuestos, pero reclamó “un debate serio y responsable entre los involucrados, en lugar de apenar a medidas impopulares que no hacen más que crear confusión en la ciudadanía”. También aconsejó al ministro de Defensa que deje de lado el problema del SMO y preste más atención a lo que ocurre en el norte del país.
“EL ESTADO PERDIÓ LEGITIMIDAD”
ASUNCIÓN.- Según el liberal Carlos Mateo Balmelli, las cosas se manejaron mal en el caso del Servicio Militar Obligatorio y las multas que se amenaza cobrar a la población que no haya cumplido.
“Hay un sector de la población paraguaya que está en un periodo de sobrevivencia, en primer término, que 400 mil guaraníes, y un trámite burocrático que hay que hacer es costoso, oneroso. Porque toda la administración pública en el Paraguay funciona mal. Entonces, presentar la objeción de conciencia va a terminar siendo también complicada. Hay una crisis terrible de representación”, dijo el liberal.
Añadió que “acá perdió la legitimidad la convocatoria de las Fuerzas Armadas. Aquí ha perdido legitimidad que el Estado paraguayo te convoque a decir que si no querés hacer el SMO hagas un servicio comunitario, porque hay una crisis terrible del Estado paraguayo y la principal de todas las crisis es que el paraguayo, los jóvenes, no creen en la legitimidad de su Estado”.
“Ese es un problema grave. Y quizás sea el primer problema que tenemos que resolver, el de la credibilidad, porque si no somos creíbles no somos representables, y si no somos representables no tenemos la autoridad que se necesita en el gobierno para poder hacer las cosas que se necesitan hacer en una sociedad”, expresó.
Mateo dijo que es allí donde ve la crisis terrible y que lo primero que debe hacer el gobierno es recuperar la autoridad, porque “el gobierno necesita tener autoridad para gobernar, no se gobierna sin autoridad. Gobernar no es una cuestión administrativa, de gestión como se le dice ahora. Gobernar es un problema de legitimidad”.
