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ASUNCIÓN.- El ministro de la Senad, Arnaldo Giuzzio, manifestó que el extitular del Detave, Ramón Benítez, supuestamente guardaba el dinero de la coima debajo de su colchón y en sus llamadas telefónicas se refería a los tomates de contrabando como las “pelotitas rojas”.
El secretario de Estado comentó que el dinero en cuestión era entregado al general en situación de retiro, por hacer la vista gorda al ingreso de las “pelotitas rojas” (tomates), tal como decía en sus conversaciones telefónicas con los demás funcionarios implicados en el esquema.
Los antecedentes revelan que el pasado viernes, en la vivienda de Ramón Benítez, ubicada en el barrio Salvador del Mundo, de la ciudad de Asunción, se desplegó un operativo y se halló la suma de 2.600 dólares. “El dinero que se encontró estaba debajo del colchón del general”, dijo Giuzzio.
Antes de esto, los intervinientes fotocopiaron USD 1.500, que luego fueron entregados al general retirado Benítez.
HASTA PRECURSORES DE DROGAS DEJABAN PASAR
Por otra parte, Giuzzio confirmó que además de los productos frutihortícolas, también dejaban ingresar ilegalmente al país sustancias químicas utilizadas como precursores de la cocaína. Mencionó que encontraron registros de una sustancia benzo, que sería benzocaína, un anestésico peligroso para la salud que es utilizado para mezclar con la cocaína y aumentar su volumen.
El producto en cuestión ingresó en Alto Paraná y fue llevado hasta Pedro Juan Caballero.
“Todo pasaba y si continuaba esto, más funcionarios iban a caer en las redes de corrupción. Acá se podía pasar una bomba atómica, pagando una cierta suma, sin ningún control, y circulaba por nuestro país sin ningún tipo de problema”, apuntó Giuzzio.
Ratificó que es iluso pensar que solo Detave participaba de la repartija, que incluso llegaba a muchos otros funcionarios de otras instituciones estatales y también a personas que ni formaban parte del Estado, pero que se encargaban de transportar el dinero de la coima.
