ADN Digital
Artículos relacionados
La decisión de 6 diputados liberales que abandonaron la bancada A y formaron una nueva no es improvisada ni consecuencia de nada que tenga que ver con la enmienda. Los legisladores pertenecen al movimiento de Enrique Salyn Buzarquis, lo que demuestra que el aliado de Efraín Alegre ha decidido dejarlo solo. El problema es simple y llano, las actitudes del presidente del Directorio hace que estén hartos de los maltratos.
ASUNCIÓN.- La semana pasada sorprendió la noticia de que 6 diputados liberales habían abandonado la bancada oficialista del PLRA. Ellos son Juan Bartolomé Ramírez, Esmérita Sánchez, Asa González, Héctor Lesme, Celso Maldonado y Gustavo Cardozo, del movimiento de Buzarquis. En todo momento dijeron que no tenían intención de pasar al llanismo, sino que conformarían la bancada C y seguirían rechazando la reelección vía enmienda.
Algunos dijeron que el motivo es la pelea por los cargos de cara al 2018, pero la diputada Sánchez explicó que el problema es más profundo y que afectaría a todo el movimiento de Buzarquis, quien hasta ahora ha sido el aliado fundamental de Alegre para obtener mayoría propia en el directorio partidario.
Sánchez recordó que luego de las internas del año pasado, el movimiento Cambiemos decidió acompañar la gestión de Alegre al frente del directorio, “pero muchas veces hay personas que se creen maestras en la política”.
“Nosotros abogamos a que nuestro partido pueda buscar la unidad, primero de todos los movimientos del Partido Liberal Radical Auténtico. Particularmente y el grupo le apoya al directorio, pero no a la persona del fulano de tal. No somos ni efrainistas ni llanistas, nosotros vamos a abocarnos a trabajar por el partido dentro del marco del respeto. No somos quién para juzgar quién se vendió y quién no. Nosotros no somos pollitos ni somos kuré ra’y para que nadie nos diga que nos vendemos”, explicó Sánchez, y señaló que en la convención extraordinaria de diciembre pasado, los integrantes de su movimiento fueron maltratados por el sector efrainista.
Agregó que “así no se le puede manejar a la gente. Cómo un partido va a buscar aliarse a otros movimientos más pequeños y primero no trata de arreglar la situación de la familia grande, que es el PLRA”.
“Yo lo que abogo es que tenga que haber respeto sobre todas las cosas, y el diálogo. Si no hay diálogo no hay forma de reestructurar el gran PLRA, hoy en manos del señor Efraín Alegre, acompañado fuertemente de un grupo de gente que no da oportunidad a otros”, concluyó.
