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La Dra. Raquel Lovera, directora médica del Hospital Nacional, explicó que hasta noviembre pasado realizaron un total de 324.925 consultas, con un aumento de 53.451 en relación al 2014, con un promedio mensual de, 29.536 dando una respuesta adecuada y oportuna a la población. Igualmente, e promedio de días de internación por paciente es de 8, clasificada dentro de una estancia relativamente corta, teniendo presente la complejidad de las patologías tratadas.
ITAUGUÁ, Dpto. Central.- El Hospital Nacional de esta localidad es el nosocomio de más alta complejidad de todo el sistema de salud pública del Paraguay y según la Dra. Lovera los niveles de complejidad están dados en consonancia con la cartera de servicios que incluye a la capacidad resolutiva, sus costos y las demandas de los pacientes. “De nada sirve pretender un cuarto nivel sino contamos con toda la infraestructura para solucionarlo. El cuarto nivel debe dejar de ser privilegio de algunas áreas y extenderse a todos los servicios. Nada mas partiendo del derecho del paciente en la medida en que logremos satisfacer la universalidad, accesibilidad y capacidad a los pacientes lo estaremos siendo (4to nivel) a cabalidad. No son solo cirugías de alta complejidad y requerimiento interdisciplinario de situaciones clínicas que imbrican varias especialidades, también es buen trato, cordialidad y en el peor de los casos consuelo enteramente humano. Los desafortunados casos de abuso y violencia que son atendidos aquí lo demuestran ostensiblemente”, indicó la profesional.
Destacó que no se debe temer a la verdad, “queremos cumplir con las demandas del 4to. nivel, pero no se mantiene ese nivel en todas las áreas, aun falta mucho camino por recorrer. La excelencia sanitaria en 4to. nivel es una actitud ante la salud, no un punto de llegada. En este hospital se desarrollan tareas complejas que la ciudadanía desconoce, pero trabajaremos para resolver mayores complejidades sanitarias y darlas a conocer”, expresó la Dra. Lovera.
Por otra parte manifestó que aumentó la cantidad de pacientes, pero no de manera proporcional en todas las áreas.
LOS DESAFÍOS
“Son muchos los desafíos. Aquí se imbrican siempre cuestiones políticamente correctas y aquellas que no lo son. Los médicos buscamos el supremo bien de la salud, un bien para todos, allí ya es político. Así, mi desafío es desempeñarme siempre en un margen políticamente correcto, a favor de los pacientes y del acto médico éticamente correcto. Gestiones transparentes, diálogo abierto a la capacidad de escuchar y apertura al cambio necesario, serán siempre márgenes rigurosos que no abandonaré y en este cargo son actitudes desafiantes”, señaló la Dra. Lovera.
