ADN Digital
Artículos relacionados
ASUNCIÓN.- El exfiscal general del Estado, Óscar Germán Latorre, desde el inicio del escándalo de los audios del JEM, dijo que las pruebas obtenidas por ese medio no tenían valor en un juicio, puesto que los fonopinchazos eran ilegales. Y ahora, con lo del abogado de Efraín Alegre y candidato a senador por el PDP, Guillermo Duarte Cacavelos, destaca que “el mecanismo que sirvió anteriormente a algunos dirigentes para proyectarse políticamente o para destruir ilegalmente a sus adversarios políticos se presenta como un búmeran. Lo que antes sirvió para atacar, hoy los golpea de la misma forma”.
“Ciertamente, esas comunicaciones entre Duarte Cacavelos y Fernández Lippmann resultan llamativas por el número y el momento en que ellas se produjeron”, añadió.
“El que juega con fuego, tarde o temprano termina quemándose (…) Lo que está ocurriendo es una demostración de que tarde o temprano la verdad se impone, las mentiras saltan a la luz y los mentirosos caen con los mismos instrumentos ilegales que en su momento utilizaron contra los demás”, expresó el exfiscal general.
Y concluyó diciendo que “como decía un viejo amigo: “Haz lo que yo diga, pero no lo que yo haga”, resaltando la tremenda hipocresía que existe en algunos autocalificados defensores de la Constitución y paladines de la verdad y la Justicia”.
