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ASUNCIÓN.- Los integrantes de la movilización de labriegos y cooperativistas cada vez son más violentos y el fiscal Martín Cantero, de la Unidad de Convivencia Ciudadana, no hace absolutamente nada para poner fin a los atropellos. Ayer uno de los manifestantes, con una varilla, agredió a un entregador que pidió cruzar por el lugar de la manifestación. Este hecho no fue aislado, ya que en diferentes puntos hubo altercados por la desmedida agresividad de los que protestaban.
Los campesinos y cooperativistas pisotean la Ley 1.066 /97, que establece prohibiciones y normas que se deben cumplir durante una manifestación. El agente fiscal reconoció que la normativa está totalmente violentada. Sin embargo, dijo que no puede realizar detenciones generalizadas. “Necesito que, si surge perturbación de la paz pública, esas personas sean demoradas y se pasen los nombres para que yo pueda ordenar su detención”, señaló.
Según los datos un hombre con el casco puesto, intentó extraer del bolsillo su teléfono celular con el objetivo de grabar la marcha. Al verlo, uno de los manifestantes, se acerca y lo empuja, tratando de apartarlo del camino e impedir que filme.En ese momento, otro integrante de la marcha, un hombre con sombrero, evidentemente miembro de los labriegos, aparta a su compañero y le gritó que le suelte”.
Sin embargo, grande fue la sorpresa cuando, el mismo hombre que impidió a su compañero pelear, siguió al ciudadano que ya se estaba retirando del sitio, y lo atacó por la espalda con una varilla, aparentemente de hierro.
