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CIUDAD DEL ESTE.- El jefe de la oficina municipal de Defensa del Consumidor, Richard González, quien es uno de los dirigentes del movimiento del intendente Miguel Prieto, dijo que no le quiere a ninguno de los 30 funcionarios que están en dicha dependencia porque son “operadores políticos”, y debían ser despedidos. Cuando uno de ellos le dijo que se trata de una persecución política, respondió: “sí, esa es la causa”.
Ayer, González llamó a la directora de RR.HH., Yolanda Paredes, para informarles que allí había 30 funcionarios y que algunos les dijeron que cumplían funciones y otros no. Pero que él no le quería a nadie de ellos por ser todos operadores políticos.
Paredes dijo que Richard González tiene el derecho de tener a personas de su confianza trabajando con él.
En las redes sociales, los funcionarios de dicha dependencia dijeron que el mencionado González les cuestionó la forma en que se visten, el tipo de corte de pelo que tienen y otros aspectos personales.
