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El fiscal de Horqueta, Pablo Zárate González, informó que mantiene la hipótesis de que el secuestro de Liduvina Ramírez, cuñada de Alejandro Ramos (exmiembro del EPP) fue hecho por el grupo “Justicieros de la Frontera” para hacerse conocer. “Estamos ante esta situación de la identificación de los integrantes de este nuevo grupo que está actuando al margen de la ley”, manifestó el investigador del Ministerio Público.

HORQUETA (Dpto. de Concepción).- La cuñada de Alejandro Ramos, exintegrante del grupo guerrillero del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), supuestamente fue secuestrada el martes último en horas de la noche, en la zona de Macchi Cué, a unos 10 kilómetros de esta localidad. Anselmo Ávalos, esposo de Liduvina Ramírez, también fue víctima de los encapuchados, quienes luego de golpearlo lo dejaron libre, no así a su esposa, quien fue encontrada en la noche del miércoles pasado.

La mujer, quien fue privada de libertad por algunas horas, entregó a las autoridades una nota en la que sus captores se dirigen a los integrantes del grupo guerrillero del Norte, a quienes advierten que irán tras ellos. “Esta es una muestra de lo que podemos hacer. Vamos a ir por todos ustedes quebrantadores de la paz. Fuera malditos EPP”, dice el panfleto que la profesora entregó a las autoridades.

Zárate contó que ahora la Fiscalía se centra en identificar a estas personas que secuestraron a Liduvina Gamarra por 23 horas entre el martes y miércoles pasados. “La señora Liduvina manifestó que este grupo se manifestó como Justicieros de la Frontera. Estamos ante esta situación de la identificación de los integrantes de este nuevo grupo que está actuando al margen de la ley”, manifestó.

Según la víctima, fue secuestrada por cinco o seis personas vestidas de civil, pero con pasamontañas. “La señora está muy shockeada, está muy golpeada”, expresó Zárate. El fiscal pidió también dar la importancia necesaria a este nuevo grupo criminal porque cuando nació el EPP tampoco nadie creía.

Tanto Liduvina Ramírez como su marido, Anselmo Ávalos, aseguraron que los captores en todo momento preguntaron por Alejandro Ramos Morel, cuñado de la docente. La pareja les dijo que nada sabían de su paradero ni de su esposa, Lourdes Bernarda Ramírez. Alejandro Ramos Morel abandonó las filas del EPP y conformó su propio grupo armado. Se sospecha que es el que mantiene secuestrado al ganadero Félix Urbieta.