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La Universidad Complutense de Madrid (UCM), donde seis docentes compatriotas realizan sus respectivas maestrías por becas, pidió oficialmente disculpas al Ministerio de Educación y Cultura (MEC) por el supuesto acoso sexual, maltrato y discriminación del que fueron objeto las docentes-alumnas, por parte de un profesor del lugar. Al mismo tiempo, la casa de estudios internacionales informó que apartó al docente de las cátedras que tiene con las paraguayas mientras prosigue las investigaciones al respecto. No obstante, el catedrático sigue estando en dicha universidad.
ASUNCIÓN.- La Complutense ha confirmado que la denuncia se produjo a finales de diciembre de 2016, días antes de las vacaciones de Navidad, en la Unidad de Igualdad de la universidad. “Las alumnas recibieron apoyo psicológico de especialistas de la universidad, según autoridades de la misma.
El campus “puso en marcha el protocolo de actuación contra el acoso sexual recientemente presentado en Consejo de Gobierno, abriendo la correspondiente información reservada al efecto”, según un comunicado oficial del campus, que alude a que se han tomado “las medidas cautelares oportunas”, según la misiva dada a conocer este martes. Según el documento emitido por la UCM, el profesor en cuestión no había sido denunciado anteriormente por ningún caso similar.
De momento, el profesor ha sido apartado de la clase del máster que impartía a las alumnas de nacionalidad paraguaya, pero sigue trabajando en el campus, según confirman desde la UCM. “Ya no está en esa asignatura, pero tenemos la inquietud de que se lo encuentren en los pasillos o por la facultad”, según relató el responsable nacional del programa de becas “Carlos Antonio López” (BECAL), Federico Mora.
En tanto, la UCM ha abierto una investigación por un supuesto caso de acoso sexual que ha tenido lugar en su Facultad de Educación. Seis estudiantes de máster, de nacionalidad paraguaya, denunciaron a finales de diciembre a un profesor que supuestamente le amenazó con malos resultados académicos si no accedían a verse con él fuera de clase. El docente ha sido apartado “cautelarmente” de las clases pero, sigue acudiendo al campus.
DISCULPAS
La denuncia fue presentada días antes de que el ministro de Educación y Cultura (MEC), Enrique Riera, visitara España. Durante los días de su visita, el rector de la UCM, Carlos Andradas, pidió a la Embajada un encuentro con él para hablar del programa de becas. En ese encuentro, le pidió disculpas en nombre de la institución. En la Complutense hay más de 30 becarios de este programa, que ha enviado a más de 400 alumnos a distintas universidades españolas.
El comunicado oficial de la Complutense añade que “quiere manifestar públicamente su absoluto compromiso con la igualdad y de tolerancia cero con cualquier conducta de acoso por razón de género o identidad sexual”, concluye la nota.
ANTECEDENTES DEL CASO
Las seis alumnas, de entre 30 y 35 años de edad, son profesoras paraguayas y se han trasladado a España becadas por el gobierno paraguayo para completar su formación, según la información del caso desvelado por la cadena SER. Son alumnas de un programa estatal de posgrado, Becal, que concedió la Presidencia de la República del Paraguay.
Según la fuente, todas acudían juntas a la asignatura que impartía el supuesto docente acosador. Ya desde el inicio de curso, en octubre, el profesor comenzó a enviarles mensajes por redes (WhatsApp y Facebook) a cada una en privado en los que “las invitaba a verse fuera y salir”, explicó Federico Mora, coordinador general del programa nacional de becas de posgrado del gobierno de Paraguay, que añade que estos mensajes “se repitieron con mucha insistencia”.
“Al no tener retorno de las alumnas, ya que ninguna quiso verse con él fuera, les amenazó asegurando que tenía mucha influencia, que esa actitud podía afectar a su maestría y a su rendimiento académico”, añadió Mora.
Aseguró que las seis estudiantes se percataron de que no eran las únicas en sufrir este acoso cuando “comenzó el maltrato en el aula”, luego que no accedieran a quedar con el docente. “Empezó a llamarlas ‘burras’ y ‘bobas’ en clase, delante del resto de compañeros y así descubrieron que había más afectadas”. Al respecto, Mora manifestó su “sorpresa y repudio” por este caso.
