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SAN PEDRO.- “De día se presentan como agricultores, a la noche actúan como secuestradores. Ellos se mezclan entre la población normal, por eso resulta difícil encontrarlos”, dijo el gobernador del departamento de San Pedro, Vicente Rodríguez, al referirse a los miembros del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), grupo criminal que castiga con su presencia a los pobladores de la zona Norte del país.
Rodríguez manifestó que El EPP va mutando en cuanto a su estrategia de terror, una de ellas es la manera cómo evitar su visualización ante la presencia de las Fuerzas de Tarea Conjunta que lo combate.
El mismo subraya que la capacidad de mimetizarse que tienen los epepistas, determina a su vez que mantengan sometidos a pobladores en la región donde se instalan.
“Muchas personas tienen miedo y callan, eso dificulta mucho los trabajos que hacen los militares y policías desplegados para luchar contra los delincuentes”, agregó Rodríguez.
Los disfraces de “personas comunes” (labriegos, comerciantes, pequeños productores) a los que recurren los terroristas ejercen, al tiempo de ser soldados del terrorismo epepista, el papel de inteligencia del grupo criminal.
El gobernador de San Pedro sostuvo que, ya por temor, ya por conveniencia (los epepistas inyectan “ayudas” con dinero y víveres) hace que nadie aporte muchas informaciones acerca del paradero de los insurgentes.
Rodríguez expresó que a los mil agentes militares y policiales que conforma el grupo de la Fuerza de Tarea Conjunta, debería agregarse otros tantos, ya que la extensión de bosques y campos en donde actúan los terroristas, es muy amplia.
