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ASUNCIÓN.- La inminente extradición de Juan Arrom y Anuncio Martí, quienes se exponen a pena privativa de libertad de entre 15 a 25 años, pone en duda de si realmente los procesados por el secuestro de María Edith Bordón, siguen en el Brasil. No obstante, el embajador paraguayo en el vecino país, Hugo Saguier Caballero, afirmó que la Policía Federal y la Interpol están monitoreando los movimientos de ambos.
Por su parte, el canciller Luis Alberto Castiglioni, coincide con el diplomático de que no tendrán posibilidad de fuga. Sostuvo además que confía en que ninguna democracia acogerá a estas personas.
Existían sospechas de que Arrom y Martí tratarían de huir hacia Bolivia, atendiendo a la afinidad ideológica con el presidente Evo Morales.
El Ministerio de Justicia del vecino país tiene hasta la próxima semana para resolver la apelación presentada por la defensa de los supuestos secuestradores, a la pérdida de condición de refugiado político concedida a los dos en agosto de 2003.
Arrom y Martí se encuentran procesados por el secuestro de María Edith Bordón, ocurrido en noviembre de 2001 y quien estuvo 64 días en cautiverio hasta su liberación. En enero de 2002, ambos denunciaron ser secuestrados y torturados por agentes policiales, con el propósito de admitir su culpabilidad, y solicitaron su asilo político en el Brasil.
Posteriormente, accionaron contra el Estado paraguayo ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), demanda de la que nuestro país fue absuelto el 4 de junio pasado.
