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ASUNCIÓN.- Solo en el sur del país, Itapúa, la cosecha dejará buenos dividendos, pero que no logrará repuntar los malos resultados del resto del país. En el recuento total, el ciclo, que terminará este mes, arrojará malos resultados.
Los productores del departamento Alto Paraná, agremiados en la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), se manifestaron “preocupados por estos magros resultados”, según Aurio Frighetto, titular de la CAP, filial del décimo departamento, uno de los más productivos.
En esta zona de la Región Oriental, existen cerca de 40 mil productores de soja que esta vez tendrán un mismo bajo rendimiento.
“El año es difícil, bastante complicado. Con la soja tempranera tuvimos un promedio de rendimiento de 800 a 1.200 kilos por hectárea”, y agregó que “con la soja de ciclo medio tampoco se alcanzan los números que se registraban en años anteriores”.
En los registros históricos del gremio en Alto Paraná, destacan que “el promedio de rendimiento más bajo en los últimos cinco años se registró en la campaña 2014/2015, con 2.498 kilos por hectárea y al comparar con la campaña actual, este número es todavía superior a lo que se está registrando en la cosecha de la soja del ciclo medio de la presente temporada; que muestra un promedio por debajo de los 2.000 kilos por hectárea”, señaló Frighetto.
El paranaense se suma al grupo de productores que hasta acá advierten una crisis. “Esto que está ocurriendo nos muestra una situación crítica” y apuntó seguidamente que “además de la producción misma de la soja, muchas otras actividades que forman parte de la cadena pueden verse perjudicadas, como el transporte o la industria”.
Hace unos días Ronald Diezte, experto en este sector, apuntó que la situación que se está generando afectará a todos los agentes de la economía, tanto en el Estado como en el de otros del sector privado, incluso se insinúa problemas sociales, “mucha gente se quedará sin empleo, como los camioneros”, dijo.
Volviendo a Alto Paraná, las previsiones negativas indican que “solo en este departamento, zona donde el cultivo de soja es relevante, se perderían 2 millones de toneladas del grano”, adelantó Frighetto.
Los problemas climáticos que generaron un mal desarrollo de las plantas, todavía persisten, “seguimos con escasez de lluvias. Es un déficit hídrico muy grande”, comentó.
