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VILLARRICA, Dpto. de Guairá.- El intendente de Paso Yobái, Ronald Vázquez (ANR-disidente), denunció que la extracción irregular de oro en dicha localidad estaría siendo respaldada por el concejal departamental Óscar Chávez, quien durante unos días asumió como gobernador de Guairá antes de ser depuesto por Rodolfo Friedmann.
Vázquez dijo que lo que ocurre hoy día en la Gobernación de Guairá es la consecuencia de la sed desmedida de poder de unos pocos que quieren ocupar altos cargos. Manifestó que la lucha de poder que existe actualmente en la Gobernación es por la explotación del oro, que genera importantes ganancias y se ha convertido en un negocio lucrativo.
Según el intendente Paso Yobái, está “bañado de oro”, aunque es una situación muy compleja y difícil. “Nuestro país mismo no está preparado, no tiene regulado el tema de la minería, es algo muy nuevo”, puntualizó.
En ese sentido, lanzó una acusación contra Óscar Chávez, concejal departamental que había tomado el control de Guairá al asumir como “gobernador” días atrás, aseguró que él está detrás del negocio irregular de la extracción de oro. “El que encabeza en Paso Yobái la explotación y el tráfico de oro es este señor que quiere entrar en la Gobernación (Óscar Chávez)”, señaló Vázquez.
El intendente sostuvo que “gracias a que no hay voluntad política de quienes cortan la torta”, refiriéndose a las autoridades y políticos involucrados, lastimosamente no es posible aprovechar las ganancias que se generan. Ante este panorama, todo el dinero que produce el oro “no queda nada para el municipio ni para la Gobernación”, se lamentó el jefe comunal.
Por otra parte, Vázquez señaló que la empresa Latin American Minerals Paraguay (Lampa) es la que posee la concesión para prospección y cateo del oro. Sin embargo, hay varios pobladores de Paso Yobái que trabajan de manera ilegal e informal, siendo respaldados por “gente de alto rango del gobierno” y políticos que obtienen ganancias con este negocio.
El jefe comunal acusó a Chávez de utilizar a un sector de la población en los trabajos de minería, pagándoles cifras ínfimas que rondarían entre 50.000 o 60.000 guaraníes diarios, y pudiendo quedarse así con la mayor parte de los ingresos.
