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Fernando Lugo dijo ayer a los 4 vientos que el proyecto de enmienda, del cual está “harto”, ya murió, porque sigue delirando con que él está habilitado para la reelección. Pero lo desmienten sus seguidores, quienes apoyan al oficialismo colorado y apuestan a esta vía para el segundo mandato, porque ellos saben que la única forma de que el exobispo pueda llegar a la reelección es ésta.
ASUNCIÓN.- Lugo es el único “luguista” que piensa que para estar habilitado a la reelección no necesita de una enmienda constitucional. Hasta su abogado, Marcos Fariña, autor de la delirante teoría de que la Constitución prohíbe solamente la reelección a quienes están en ejercicio de la Presidencia y no a los expresidentes, ya vio la luz y llegó a recomendar a su cliente que apueste por la enmienda.
Pero el exobispo sigue en sus trece y ahora hasta se anima a decir que “la enmienda ya murió”, pretendiendo convencer a la ciudadanía de que el proyecto no será presentado ante el Senado, tal como lo pretenden sus propios colegas y correligionarios del Frente Guasu, el oficialismo colorado y el llanismo liberal.
Desde el principio Lugo votó en contra de la enmienda, y a pesar de todas las señales de neón que tiene en su camino, no cambia públicamente de postura, es decir que con una mano rechaza el proyecto, y con la otra instruye a sus seguidores a que lo apoyen, porque muy en el fondo, él también sabe que es la única chance que tiene de volver a ser candidato en el 2018.
Pero lo disimula, así que ayer dijo a los periodistas que se encontraban en el Senado que “la enmienda ya murió”, o por lo menos para él, ya que inmediatamente después reconoció que siguen las negociaciones en las que participa el Frente Guasu.
“Los negociadores son Carlos Filizzola y Sixto Pereira, pero ellos saben perfectamente mi posición, mi postura desde un inicio”, dijo el expresidente, quien dice que la enmienda es inconstitucional, pero ha llegado a reconocer públicamente que, de ser aprobada, la utilizará para volver al poder.
Dijo que para su sector las negociaciones continúan porque “están convencidos de que eso tiene validez”, lo que fue confirmado por Hugo Richer, quien, al ser consultado sobre el tema dijo que la enmienda sigue teniendo grandes posibilidades. Pero Lugo sigue con su delirio de que “no dependemos de la enmienda; tenemos nuestro propio itinerario, vamos a ir por la Corte”.
