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La llamada disidencia, que responde a Mario Abdo Benítez, amenaza con que va a apelar a recursos violentos para evitar que la ciudadanía manifieste su voluntad popular, según Fernando Ayala, miembro de la Junta de Gobierno y la Comisión Ejecutiva de la ANR. Pero agregó que la ciudadanía ya está despierta y no se deja engañar.
ASUNCIÓN.- A 28 años del golpe de Estado que derrocó la dictadura, el stronismo representado por los marioabdistas que sentaron sus reales en el Senado, donde tienen mayoría por la alianza que mantienen con grupos de izquierda a los que antes perseguían, pretenden que se concrete un gran retroceso, evitando que la ciudadanía pueda decidir su destino.
Ayala dijo que la pretensión de retroceder a tiempos de la dictadura “no me extraña viniendo de esa gente. Lo que se logró hace 28 años fue justamente esta democracia incipiente que estamos desarrollando. Principalmente, se nota que la gente que no recuerda o no conoció lo que vivíamos en esa época, no sabe que no se podía ni opinar. Y estos ahora hablan y dicen lo que les da la gana justamente porque la conquista de las libertades públicas se lo permite”.
Hasta para mentir hay libertad ahora, y por eso “se dicen grandes mentiras, se manipula a la gente, se distorsionan los hechos. Pero la ciudadanía está despierta. Y su propio sentir es que tenemos un país diferente. Vamos a tener mayor cantidad de recursos, y ahora tenemos que priorizar la educación”, manifestó.
Según el dirigente colorado, el largo camino iniciado hace 28 años tuvo logros importantes, especialmente en lo que hace al respeto de las libertades individuales, a las minorías y los resultados electorales. “El Partido Colorado siempre respetó los resultados electorales, aun cuando le fueron desfavorables”, agregó.
Explicó que el problema de quienes siguen a Abdo Benítez y son los herederos del stronismo, es que “no saben dirimir; no tienen la capacidad de respetar opiniones diferentes; están acostumbrados a que todo el mundo piense como ellos. Nosotros estamos planteando la revisión de la norma constitucional que prohíbe la reelección, porque ya no tiene razón de ser. Planteamos un proyecto político nacional, que estará vigente los próximos 200 años”.
